Alberta plantea elevar el límite de velocidad en autopistas divididas a 120 km/h: entre eficiencia vial, seguridad y debate público

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THE LATIN VOX (07 de Noviembre del 2025).- Por Daniela Medina

El gobierno provincial de Alberta ha lanzado una consulta pública para explorar la posibilidad de aumentar el límite de velocidad en autopistas rurales divididas de 110 km/h a 120 km/h, poniendo sobre la mesa un cambio significativo en la política vial de la provincia.
La iniciativa se enmarca dentro de un marco más amplio de inversiones en seguridad vial, infraestructura y modernización de la red de carreteras, pero desata un debate profundo sobre seguridad, diseño vial, mantenimiento y percepción ciudadana.

¿Qué se propone exactamente?

  • Entre el 7 de noviembre y el 12 de diciembre de 2025, Alberta abrirá una encuesta en línea para que los ciudadanos expresen su opinión sobre el aumento del límite en autopistas rurales divididas.
  • El aumento propuesto consiste en +10 km/h: pasar de 110 km/h a 120 km/h en ciertos tramos que cumplen criterios de diseño, división de calzadas y condiciones de seguridad.
  • El ministro de Transporte y Corredores Económicos, Devin Dreeshen, señaló que “queremos que los albertanos puedan conducir al límite para el que las autopistas están diseñadas” y vinculó la medida a la inversión de más de $1,5 mil millones CAD este año para mejorar infraestructura y seguridad vial.
  • Además de la velocidad, la encuesta incluye preguntas sobre otras medidas viales: limitar el uso del carril más a la izquierda para camiones en autopistas de tres o más carriles y cualquier otro cambio que mejore la experiencia de conducción.

¿Por qué Alberta considera este aumento?

El gobierno enumera varias razones para esta propuesta:

  • Sincronización entre velocidad de diseño y velocidad permitida: Se argumenta que algunos tramos ya están construidos para soportar velocidades mayores que el límite vigente, y que el 110 km/h se ha vuelto una restricción que no coincide con el comportamiento real de los conductores.
  • Eficiencia vial y ahorro de tiempo: Al subir el límite, se estima que los trayectos se harán más rápidos, lo cual puede tener repercusiones en productividad, logística y costo de transporte.
  • Modernización de la flota vehicular: La mejora en tecnología de automóviles y autopistas mejores frenos, control de estabilidad, pavimentos de alta calidad da soporte a la hipótesis de que velocidades mayores pueden ser seguras si el entorno vial lo permite.
  • Inversión en seguridad: El anuncio está acompañado de un compromiso financiero para mejorar la infraestructura vial, lo cual sugiere que el aumento del límite viene acompañado de contramedidas de seguridad.

Las preocupaciones y los riesgos preocupantes

Si bien la iniciativa tiene respaldo oficial, también enfrenta críticas y varios riesgos:

  • Seguridad vial: Elevar el límite de velocidad implica que los accidentes, cuando ocurran, tendrán una mayor energía cinética involucrada, lo que puede aumentar la gravedad de las colisiones. Un miembro de la Asamblea Legislativa de Alberta ya expresó que “los choques que ocurren a mayor velocidad producen tasas más altas de lesión, muerte y daños materiales”.
  • Variabilidad de condiciones: Las autopistas rurales albertanas pueden estar sometidas a condiciones climáticas severas (nieve, hielo, viento), presencia de fauna, o diseño no uniforme, lo cual puede complicar la seguridad cuando se aumentan los límites.
  • Aceptación ciudadana y percepción pública: Aunque algunos conductores pueden estar de acuerdo, la encuesta revela que la medida deberá contar con aceptación popular. Si se percibe como una concesión a la velocidad sin mejoras reales en seguridad, podría generar rechazo.
  • Discrepancia entre velocidad permitida y velocidad real: Algun@s conductores ya circulan por encima del límite actual; elevarlo puede llevar a que los rangos de “velocidad común” se trasladen aún más arriba, lo que puede complicar los patrones de conducción. Comentarios en foros ya advierten que “subir a 120 km/h hará que muchos manejen a 130-140 km/h”.
  • Mantenimiento e infraestructura existente: Aumentar los límites sin adecuar totalmente la infraestructura barandillas, señalización, iluminación, condiciones del pavimento— puede incrementa los riesgos, según analistas.

¿Qué se espera que pase ahora?

  • Una vez cerrada la encuesta, el gobierno revisará los resultados y podrá lanzar un proyecto piloto con límite de 120 km/h en ciertos tramos seleccionados de autopista dividida, con monitoreo riguroso de comportamiento vial.
  • Si el piloto es exitoso medido por velocidades reales, tasa de accidentes, condiciones de tráfico el cambio podría expandirse gradualmente. De lo contrario, podría descartarse o modificarse.
  • Durante este periodo, las autoridades enfatizan que los conductores deben seguir adaptándose a condiciones: “los límites están para condiciones ideales; cuando la carretera está mojada, hay visibilidad reducida o nieve, se debe conducir con cautela”.

Escenarios probables de desarrollo

Escenario A – Implementación exitosamente gradual
La encuesta obtiene un respaldo mayoritario, el piloto arroja resultados positivos en seguridad y flujo de tráfico, y el nuevo límite de 120 km/h se instala en varios tramos durante 2026-2027. Esto refuerza la imagen de Alberta como región que moderniza su infraestructura y adapta su red vial a condiciones actuales.

Escenario B – Resistencia pública y ajustes al plan
La encuesta muestra división de opiniones, grupos de seguridad vial y municipios sopesan que la medida aumenta los riesgos; el proyecto se retrasa, se limita a pocos tramos o se acompaña de medidas más estrictas de vigilancia y diseño vial antes de adoptarlo plenamente.

Escenario C – Retroceso o cancelación
Si un incidente grave ocurre durante el piloto, o si los datos muestren aumento de accidentes, el gobierno podría abandonar el incremento del límite y mantener el 110 km/h, lo cual generaría críticas de falta de visión y costo hundido en la inversión de infraestructura.

¿Por qué resulta relevante internacionalmente?

  • Las decisiones sobre límites de velocidad reflejan cómo los gobiernos ponderan entre eficiencia, seguridad vial y modernización del transporte.
  • En un contexto de preocupación global por tránsito seguro, tecnología automotriz avanzada, vehículos autónomos y sostenibilidad, la experiencia de Alberta puede servir como caso de estudio para otras regiones.
  • Cambios en velocidad límite afectan logística, costos de transporte de mercancías, emisiones de gases de efecto invernadero (al influir en consumo de combustible) y la percepción de movilidad eficiente.

La propuesta de Alberta de elevar el límite de velocidad a 120 km/h en determinadas autopistas divididas representa mucho más que un simple ajuste numérico: es un intento por alinear la infraestructura vial con las expectativas modernas, la tecnología automotriz y la eficiencia del transporte provincial.
Pero lograr ese objetivo exigirá más que cambiar señales: requerirá consenso ciudadana, inversión en seguridad, vigilancia eficiente y una estrategia de comunicación que logre que el público confíe en que “más velocidad” no significará “más riesgo”.
El camino está abierto: conducir más rápido puede parecer atractivo, pero la pregunta clave será si se puede hacer de forma segura, justa y eficaz. La encuesta pública de Alberta será la primera parada de ese proceso.

Fuente: globalnews.ca

Foto: Google fotos


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