THE LATIN VOX (18 de septiembre de 2025).- Por Francisco Javier Valdiviezo Cruz.
Nvidia, el fabricante de chips más valioso del mundo, anunció este jueves una inversión de 5.000 millones de dólares en Intel y una alianza estratégica para desarrollar centros de datos de inteligencia artificial y nuevos productos para computadoras personales.
La noticia llega un mes después de que la administración Trump confirmara la compra de un 10% de participación en Intel, un movimiento sin precedentes que busca reforzar la posición de Estados Unidos en la carrera global por los semiconductores.
Las acciones de Intel se dispararon un 27% en las primeras horas de cotización en Wall Street, mientras que Nvidia subió más de un 3%, consolidando su posición como la empresa más valiosa del planeta, con una capitalización bursátil de 4 billones de dólares.
Una fusión de plataformas
Nvidia acordó comprar acciones ordinarias de Intel a 23,28 dólares por título, pendiente de aprobación regulatoria. Para el director ejecutivo de Nvidia, Jensen Huang, la operación representa un punto de inflexión:
“Esta histórica colaboración une estrechamente el ecosistema de inteligencia artificial y cómputo acelerado de Nvidia con las CPU de Intel y la vasta plataforma x86. Juntos sentaremos las bases de la próxima era de la computación”.
Ambas compañías trabajarán en integrar sus arquitecturas: Intel fabricará chips personalizados para los centros de datos de Nvidia, mientras que los procesadores para PC de Intel incorporarán tecnología gráfica y de aceleración propia de Nvidia.
El salvavidas de Intel
El acuerdo supone un respiro crucial para Intel, un pionero de Silicon Valley que dominó la era de la computación personal, pero que se rezagó tras el auge de los móviles en 2007 y quedó marginado en el reciente boom de la inteligencia artificial.
La empresa perdió 19.000 millones de dólares en 2024 y acumula más de 3.700 millones en pérdidas en lo que va de 2025, con planes de recortar un cuarto de su plantilla antes de fin de año.
No es la primera inyección de capital: en agosto, SoftBank invirtió 2.000 millones de dólares por un 2% de participación en Intel, anticipando los movimientos del gobierno estadounidense.
La apuesta geopolítica de Trump
El expresidente Donald Trump ha hecho de los semiconductores una prioridad estratégica. Ha amenazado con imponer aranceles del 100% a los chips importados y negoció con Nvidia y AMD acuerdos de exportación que les permiten vender procesadores de menor potencia a China a cambio de entregar el 15% de sus ingresos al Tesoro estadounidense.
La entrada de Nvidia en Intel refuerza la narrativa de Washington de proteger la industria nacional en un mercado dominado por Asia y de asegurar suministros críticos en plena expansión de la inteligencia artificial.
Nvidia, la dueña del tablero
Los analistas ven la operación como una validación de la hegemonía de Nvidia. Dan Ives, experto tecnológico de Wedbush, lo resumió así:
“El futuro de los chips sigue siendo el mundo de Nvidia, con todos los demás pagando renta, mientras gobiernos y empresas hacen fila por acceder a los procesadores más avanzados del planeta”.
Con una inversión mundial en infraestructuras de IA estimada entre 3 y 4 billones de dólares hacia 2030, la alianza Nvidia-Intel puede marcar el inicio de una nueva etapa: una en la que el gigante caído del silicio busca resurgir bajo la sombra del campeón absoluto de la inteligencia artificial.
Crédito fotográfico: NBC News