La actriz Amanda Seyfried ha decidido no asistir al Festival Internacional de Cine de Toronto (TIFF) para promocionar su nueva película Seven Veils, a pesar de haber obtenido una exención para viajar a Canadá. La estrella de Hollywood ha explicado que no se siente cómoda con la situación actual del país, que atraviesa una crisis sanitaria y laboral.
Seyfried, que está nominada al Oscar por su papel en Mank, protagoniza el thriller psicológico Seven Veils, dirigido por el canadiense Florian Zeller. La película se estrenará mundialmente en el TIFF, que se celebrará del 9 al 18 de septiembre en Toronto. Sin embargo, la actriz no podrá acompañar a su director y a sus compañeros de reparto en la alfombra roja.
La razón es que Seyfried no se siente a gusto con la idea de viajar a Canadá en medio de una pandemia y de una huelga de trabajadores del sector audiovisual. Aunque la actriz había obtenido una exención para entrar en el país sin tener que hacer cuarentena, ha preferido quedarse en Estados Unidos y participar en el festival de forma virtual.
“Me encantaría estar allí, pero no me parece justo”, dijo Seyfried en una entrevista. “Hay mucha gente que está sufriendo y luchando por sus derechos. No quiero ser parte del problema, quiero ser parte de la solución”, añadió.
La actriz se refirió así al conflicto laboral que afecta a unos 60.000 trabajadores del cine y la televisión en Canadá, que amenazan con ir a la huelga si no se mejoran sus condiciones de trabajo y salariales. El sindicato que los representa, IATSE, ha convocado una votación para el 12 de septiembre, justo después del inicio del TIFF.
Seyfried dijo que respeta y apoya a los trabajadores del sector, y que espera que se resuelva pronto la situación. También expresó su admiración por el TIFF y por el público canadiense, al que calificó de “increíble”. Asimismo, se mostró entusiasmada con su nueva película, que calificó de “intensa” y “sorprendente”.
Seven Veils es una adaptación de la obra teatral homónima de Christopher Hampton, que cuenta la historia de una mujer que sufre un trastorno disociativo de la identidad. Seyfried interpreta a siete personalidades diferentes de la misma mujer, lo que supuso un gran reto para ella como actriz.
“Es una película muy especial, muy diferente a todo lo que he hecho antes”, dijo Seyfried. “Fue un desafío enorme, pero también muy gratificante. Estoy muy orgullosa del resultado y espero que la gente la disfrute”, concluyó.