Análisis: El resurgir del patriotismo canadiense frente a las provocaciones de Donald Trump

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THE LATIN VOX (16 de febrero del 2025).- Por Francisco Javier Valdiviezo Cruz

Las recientes declaraciones de Donald Trump sobre la posible anexión de Canadá a Estados Unidos han desatado una oleada de orgullo patriótico en el país norteamericano. Sin embargo, este fenómeno ha ido más allá de una simple reacción, reavivando también un debate profundo sobre la compleja identidad nacional de Canadá y su relación con la historia.

Un comercial famoso de la marca de cerveza Molson Canadian, que se estrenó en el año 2000, muestra a un hombre declarando con firmeza su identidad canadiense mientras responde a los estereotipos comunes sobre su país.

Con una gigantesca bandera de arce ondeando detrás de él, el hombre dice: “No soy un leñador ni un comerciante de pieles. Tengo un primer ministro, no un presidente. Hablo inglés y francés, no americano. Y pronuncio ‘about’, no ‘a boot’”. El público, inicialmente indiferente, estalla en aplausos mientras el hombre grita con orgullo: “¡Soy canadiense!”

Este anuncio, que celebraba la identidad canadiense, ha cobrado una nueva relevancia en un contexto actual en el que la soberanía de Canadá se ha visto amenazada por las provocaciones diplomáticas del presidente estadounidense.

Trump sugirió en diversas ocasiones que Canadá podría ser el siguiente estado de la unión, descalificando incluso al primer ministro canadiense Justin Trudeau al llamarlo «gobernador». Estas amenazas han generado una respuesta nacional, que se ha manifestado en una oleada de patriotismo popular.

El patriotismo canadiense ha florecido en varias formas: desde vuelos en avión en forma de hoja de arce hasta aficionados que abuchean a los equipos deportivos estadounidenses, pasando por un viral compromiso de comprar solo productos fabricados en Canadá. En un sketch viral, un comprador reprende a otro por adquirir ketchup estadounidense, acusándolo de traidor en medio de la “guerra comercial”.

“Ha sido absolutamente abrumador”, comenta Dylan Lobo, fundador de MadeInCa, una página web que promueve productos fabricados en Canadá. “Estamos luchando por mantener al día las solicitudes. La gente está frustrada y busca formas de apoyar lo canadiense y consumir productos nacionales”.

A medida que se acercan las elecciones federales, los políticos canadienses han mostrado su apoyo al sentimiento patriótico. De hecho, cinco ex primeros ministros se unieron en un mensaje conjunto pidiendo la unidad de la nación y celebrando lo que consideran el «verdadero norte, fuerte y libre» de Canadá.

Una encuesta reciente reveló un aumento significativo del patriotismo en Canadá, especialmente en la región francófona de Quebec, históricamente distante del fervor nacionalista. Este repunte es aún más llamativo si se toma en cuenta la apropiación de la bandera canadiense por parte de los protestantes de derecha en las manifestaciones del Convoy de la Libertad en 2020, lo que había provocado una percepción dividida de la bandera en ciertos sectores de la sociedad.

Al mismo tiempo, el resurgimiento del orgullo nacional ha coincidido con una mayor reflexión sobre los derechos de los pueblos indígenas. En las últimas semanas, Canadá ha vivido un debate intenso sobre la memoria histórica, especialmente tras la caída de estatuas de figuras coloniales y la revisión de nombres de edificios vinculados a la historia de la colonización.

“Las declaraciones de Trump sobre la anexión realmente han despertado algo en las personas”, afirma Wilfred King, líder de la Nación Gull Bay First Nation. “Pero también es importante recordar que los pueblos indígenas son los que realmente pueden hablar de soberanía en Canadá, ya que nuestra historia está marcada por alianzas con la Corona, no por una rendición a fuerzas externas”.

King también señala que, a pesar de la opresión y la marginalización sufrida por las comunidades indígenas, los pueblos originarios de Canadá han jugado un papel crucial en la defensa de la nación. “En las dos guerras mundiales, los pueblos indígenas ofrecieron más voluntarios que cualquier otro grupo para luchar junto a sus aliados. Sin embargo, a su regreso fueron ignorados y traicionados por quienes los llamaron ‘amigos’”.

La reflexión sobre la soberanía canadiense, en este contexto, no solo está relacionada con el nacionalismo en un sentido convencional, sino con las heridas abiertas de las comunidades indígenas que reclaman su verdadera autonomía. “Lo que está sucediendo ahora con las amenazas externas de Estados Unidos es algo que los pueblos indígenas han vivido durante más de 175 años”, sostiene King. “Es un reflejo de cómo el gobierno ha tratado a las Primeras Naciones en Canadá”.

Por su parte, Jeff Douglas, quien interpretó al icónico personaje de «Joe Canadá» en el comercial de Molson, expresa sentimientos encontrados sobre el resurgimiento del patriotismo. Aunque en su momento no comprendía completamente la complejidad histórica de Canadá, Douglas afirma que el tiempo y la experiencia le han permitido entender mejor la historia y los desafíos del país.

“Creo que todavía podemos estar orgullosos, pero debemos ser conscientes de nuestra historia y de las injusticias pasadas y presentes. El orgullo nacional no puede existir sin esa conciencia crítica”, reflexiona Douglas, quien se convirtió en un reconocido locutor de radio.

Douglas agrega que, aunque el patriotismo ciego no ayuda a sanar las heridas históricas, es inevitable que en tiempos de crisis los canadienses busquen unidad para hacer frente a las amenazas externas. “El amor por mi país, o más bien por las personas que lo habitan, es un amor por lo que podríamos llegar a ser. Y es más profundo cuando comprendo las complejidades de nuestro pasado y nuestra realidad”, concluye.

En última instancia, el resurgimiento del patriotismo canadiense, alimentado por las provocaciones de Trump, parece ser más que una simple reacción a las amenazas externas. Se ha convertido en una oportunidad para reflexionar sobre la identidad canadiense, reconocer sus contradicciones y, quizás, aprender a amar a su país, a pesar de sus imperfecciones.

Crédito fotográfico: LiveWire Calgary


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