En un sorprendente giro de los acontecimientos, Pavel Durov, el fundador y CEO de la popular aplicación de mensajería Telegram, fue arrestado en Francia. Según informes de medios locales, Durov fue detenido el sábado por la noche al aterrizar su jet privado en el aeropuerto de Le Bourget, en las afueras de París.
La detención de Durov ha generado un gran revuelo en las redes sociales y ha sido objeto de especulación y debate. Según las fuentes, el arresto se produjo en el marco de una investigación preliminar que se centra en la falta de moderadores en la plataforma Telegram, lo que, según las autoridades, ha permitido que se lleven a cabo actividades criminales sin control.
Telegram, conocida por su enfoque en la privacidad y la seguridad, es una de las aplicaciones más descargadas en el mundo, con cerca de mil millones de usuarios. Sin embargo, esta misma característica ha sido criticada por permitir que grupos criminales y extremistas utilicen la plataforma para sus actividades.
Durov, de 39 años, se convirtió en ciudadano francés en 2021 después de haber dejado Rusia en 2014 debido a su negativa a cumplir con las demandas del gobierno ruso de cerrar comunidades opositoras en su plataforma de redes sociales VK. Desde entonces, ha residido en Dubái, donde ha continuado desarrollando Telegram.
La noticia de su arresto ha provocado reacciones mixtas. Mientras algunos ven la detención como un ataque a la libertad de expresión y la privacidad, otros la consideran una medida necesaria para combatir el crimen en línea. La embajada rusa en Francia ha declarado que está tomando medidas inmediatas para aclarar la situación, aunque no ha sido contactada por el equipo de Durov.
El arresto de Durov también ha suscitado críticas de varios políticos rusos, quienes han acusado a Francia de actuar de manera dictatorial. Mikhail Ulyanov, representante de Rusia ante organizaciones internacionales en Viena, comentó en la red social X que “algunas personas ingenuas aún no entienden que si juegan un papel más o menos visible en el espacio informativo internacional, no es seguro para ellos visitar países que se mueven hacia sociedades mucho más totalitarias”.
Telegram ha sido una herramienta crucial en varios movimientos prodemocráticos y protestas en países con leyes estrictas. También ha sido una fuente importante de información sobre la guerra en Ucrania, utilizada tanto por funcionarios de Moscú como de Kiev para difundir noticias y propaganda.
La detención de Durov plantea preguntas sobre el futuro de Telegram y su capacidad para operar como una plataforma neutral en un mundo cada vez más polarizado. Mientras tanto, los usuarios de la aplicación y defensores de la privacidad en todo el mundo esperan con ansias más detalles sobre el caso y las posibles implicaciones para la libertad en línea.