El 27 de febrero de 2025, la Asociación de Maestros de New Brunswick (NBTA, por sus siglas en inglés) expresó su creciente preocupación por la escasez de docentes certificados en la provincia.
Según datos recientes, en enero de 2025, 192 maestros no certificados estaban trabajando en los distritos escolares anglófonos de New Brunswick, un aumento significativo en comparación con los 132 registrados en el otoño de 2024. Estas cifras no incluyen a los maestros sustitutos.
Peter Lagacy, presidente de la NBTA, destacó que la situación es alarmante y que la escasez de personal docente está afectando la calidad de la educación en la provincia. Además, se proyecta que más de 1,200 maestros anglófonos serán elegibles para jubilarse en los próximos cinco años, lo que podría agravar aún más la crisis si no se implementan medidas efectivas para atraer y retener a nuevos educadores.
La escasez de maestros ha llevado a que personas sin certificación docente, e incluso sin una licenciatura en educación, asuman roles de enseñanza en las aulas. Esta situación ha generado preocupaciones sobre la calidad de la educación y el bienestar tanto de los estudiantes como del personal educativo. Una encuesta interna realizada por la NBTA a finales de 2023 reveló que muchos docentes trabajan en aulas superpobladas y en edificios con ventilación inadecuada. Además, aproximadamente la mitad de los encuestados reportaron haber experimentado abuso verbal y físico en el entorno escolar.
La líder del Partido Liberal, Susan Holt, y el miembro del Partido Verde por Kent North, Kevin Arseneau, han instado al gobierno provincial a abordar de manera urgente estos desafíos en el sistema educativo. Ambos enfatizan la necesidad de crear un entorno de trabajo seguro y atractivo para los docentes, así como de garantizar que los estudiantes reciban una educación de calidad impartida por profesionales calificados.
La NBTA ha propuesto varias soluciones para mitigar la crisis, incluyendo incentivos para atraer a nuevos maestros, programas de mentoría para apoyar a los educadores novatos y mejoras en las condiciones laborales para retener al personal actual. Sin embargo, la implementación de estas medidas requiere un compromiso y una inversión significativa por parte del gobierno provincial.
La situación en New Brunswick refleja una tendencia más amplia en Canadá, donde varias provincias enfrentan desafíos similares relacionados con la escasez de personal docente y la necesidad de mejorar las condiciones en el sector educativo.