Aumenta el estrés financiero de los trabajadores canadienses ante la incertidumbre económica

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Según una encuesta realizada por la empresa de consultoría Morneau Shepell, el estrés financiero de los trabajadores canadienses ha aumentado en los últimos meses debido a la pandemia de COVID-19 y la inflación. El índice de salud mental de la empresa, que mide el bienestar psicológico de los empleados, cayó a -11,5 en septiembre, el nivel más bajo desde abril de 2020.

La encuesta reveló que el 40% de los trabajadores canadienses se sienten más estresados por su situación financiera que hace un año, y que el 28% han tenido que recurrir a sus ahorros o endeudarse para cubrir sus gastos. Además, el 22% han tenido que reducir sus gastos en alimentos, vivienda o salud para hacer frente a la crisis.

El estrés financiero también afecta al rendimiento laboral y a la salud física y mental de los trabajadores. Según la encuesta, el 37% de los empleados han experimentado una disminución de su productividad, el 35% han tenido dificultades para concentrarse y el 34% han sufrido ansiedad o depresión.

La encuesta también mostró que hay diferencias significativas entre los grupos demográficos. Por ejemplo, las mujeres, los jóvenes, los trabajadores con bajos ingresos y los que viven en zonas urbanas son los más afectados por el estrés financiero. Asimismo, los trabajadores de sectores como la hostelería, el turismo, el comercio minorista y la educación son los que más han sufrido las consecuencias de la pandemia.

Ante este panorama, la empresa Morneau Shepell recomienda a los empleadores que ofrezcan apoyo y recursos a sus trabajadores para ayudarles a mejorar su salud financiera y mental. Algunas medidas que sugiere son ofrecer programas de educación financiera, facilitar el acceso a asesoramiento profesional y brindar beneficios flexibles que se adapten a las necesidades de cada empleado.

La empresa también aconseja a los trabajadores que busquen ayuda si se sienten abrumados por su situación financiera, que establezcan un presupuesto realista y que prioricen sus gastos esenciales. Además, recomienda que mantengan hábitos saludables como hacer ejercicio, dormir bien y cuidar su alimentación.

El estrés financiero es un problema serio que puede tener graves repercusiones en la salud y el bienestar de las personas. Por eso, es importante que tanto los empleadores como los empleados tomen medidas para prevenirlo y afrontarlo de manera efectiva.


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