Las infecciones por estreptococo A, que pueden causar desde enfermedades leves como la faringitis estreptocócica hasta afecciones graves y mortales como la fascitis necrotizante o el síndrome de shock tóxico, están aumentando en Canadá y otros países, según informaron varios medios de comunicación. Los casos de infecciones invasivas por estreptococo A (iGAS), que ocurren cuando la bacteria entra en la sangre o el tejido profundo, alcanzaron un nuevo máximo en 2023 en Canadá, con más de 2.000 casos y 200 muertes. Otras naciones, como el Reino Unido y Japón, también han reportado incrementos notables.
La gran pregunta es: ¿por qué? ¿Por qué estamos viendo un aumento de estas infecciones graves, tanto en Canadá como en el extranjero?
Los expertos citan una variedad de factores, como la falta de inmunidad, el aumento de las enfermedades respiratorias, el cambio climático y la variabilidad genética de la bacteria. El estreptococo A es una bacteria común y a menudo inofensiva que se encuentra en la garganta o la piel de muchas personas. Normalmente se trata con antibióticos, pero en algunos casos puede provocar complicaciones que implican un daño masivo a la piel y los tejidos blandos, que pueden conducir a amputaciones o incluso a la muerte, a veces en tan solo 12 o 24 horas después de la infección.
Los síntomas de una infección invasiva por estreptococo A pueden incluir fiebre, dolor de garganta, erupción cutánea, dolor muscular, confusión, mareos, náuseas y vómitos. Los médicos recomiendan buscar atención médica de inmediato si se sospecha de una infección grave, especialmente si se tiene una herida abierta o se ha estado en contacto con alguien que tenga una infección por estreptococo A.
Los investigadores están trabajando para desarrollar una vacuna contra el estreptococo A, que podría prevenir muchas de las infecciones invasivas y no invasivas causadas por la bacteria. Sin embargo, la vacuna aún no está disponible y se enfrenta a varios desafíos, como la diversidad de cepas de la bacteria y la necesidad de probar su seguridad y eficacia en diferentes poblaciones.
Mientras tanto, los expertos instan a la población a tomar medidas de prevención, como lavarse las manos con frecuencia, cubrirse la boca al toser o estornudar, evitar compartir objetos personales y mantener las heridas limpias y cubiertas. También recomiendan estar atentos a los signos de alarma y buscar ayuda médica lo antes posible si se presentan síntomas de una infección grave por estreptococo A.