Las Luces del Norte podrían hacerse más frecuentes y espectaculares en el futuro cercano debido a la intensificación de las tormentas solares. Desde el pasado sábado, el Sol ha estado emitiendo una radiación incrementada, y un flare solar masivo el martes interrumpió las comunicaciones de radio de alta frecuencia a nivel mundial. Este grupo de manchas solares particularmente activo, que ya ha causado impresionantes auroras boreales, volverá a orientarse hacia la Tierra en aproximadamente dos semanas, y los científicos anticipan que aún será lo suficientemente grande y complejo como para generar más explosiones. Estas explosiones podrían impactar el campo magnético de la Tierra, creando más Luces del Norte.
El Sol se está acercando a lo que se conoce como el “máximo solar”, un punto en su ciclo de 11 años cuando su actividad es más fuerte, lo que significa que podríamos ver un aumento en la cantidad y la intensidad de las manchas solares. Aunque se esperaba que este ciclo fuera tranquilo, parece estar mostrándose más fuerte de lo previsto.
La tormenta geomagnética del último fin de semana fue un evento que ocurre una vez cada 30 años y fue la más grande desde 2003, alcanzando una clasificación de alerta G5, la más alta otorgada por los pronosticadores. Además de las deslumbrantes auroras, estas tormentas tienen efectos significativos en las comunicaciones globales, las redes eléctricas y los sistemas GPS, lo que demuestra que no se trata solo de luces bonitas; también hay desventajas que considerar.