
Una avioneta Beechcraft Super King Air B200, operada por la empresa neerlandesa Zeusch Aviation, se estrelló al despegar del aeropuerto London Southend este domingo 13 de julio poco antes de las 16:00 (BST), generando una intensa bola de fuego visible a varios metros de distancia y obligando al cierre inmediato del aeropuerto.
Insólito accidente y respuesta inmediata
- El avión, matrícula PH-ZAZ, despegó con destino a Lelystad (Países Bajos), tras haber volado desde Atenas y Pula ese mismo día. Testigos, como John Johnson, relataron que el piloto saludó a los espectadores antes del despegue, tras lo cual la aeronave perdió sustentación, realizó una fuerte inclinación hacia la izquierda y cayó de cabeza, generando una gran bola de fuego minutos después del despegue .
- La Policía del condado de Essex fue alertada a las 15:58, y respondió junto a bomberos, cuatro ambulancias, personal especializado en zonas de riesgo y una ambulancia aérea.
- Cierre del aeropuerto y evacuaciones
- London Southend cerró todas sus operaciones hasta nuevo aviso. Al menos cinco vuelos internacionales fueron cancelados y compañías como easyJet reenviaron sus vuelos hacia aeropuertos alternativos.
- Como medida preventiva, se evacuó el cercano Rochford Hundred Golf Club y el Westcliff Rugby Club, dada su proximidad al lugar del accidente.
Víctimas y condición
- Zeusch Aviation confirmó que el vuelo SUZ1 estuvo involucrado en el accidente y está colaborando con las autoridades. Hasta ahora no se han informado cifras oficiales sobre ocupantes, heridos o fallecidos. El avión puede transportar hasta siete pasajeros y dos tripulantes, además de equipamiento médico. La investigación aún está en curso .
Imparables investigaciones
- La Air Accidents Investigation Branch (AAIB) despliega un equipo en el sitio para analizar factores técnicos, registros de vuelo y factores humanos.
- La Policía de Essex continúa acordonando el área y solicita no acercarse mientras persisten las labores de rescate e inspección .
Conclusión
Este trágico accidente ha paralizado temporalmente el London Southend Airport, interrumpiendo vuelos y encendiendo un operativo de emergencia sin precedentes en la región.
Aunque la causa del siniestro aún es incierta, la colaboración entre la AAIB y Zeusch Aviation será clave para arrojar luz sobre lo ocurrido.
Mientras tanto, la seguridad de los pasajeros y el restablecimiento de las operaciones aeroportuarias permanece como prioridad absoluta.