Un reciente informe ha revelado que una campaña de bots que apoyaba al líder conservador canadiense Pierre Poilievre demuestra lo fácilmente accesibles que son las herramientas de inteligencia artificial (IA) para la creación de mensajes políticos. La campaña, que tuvo lugar en julio, inundó la plataforma de redes sociales X con publicaciones que pretendían ser de personas que asistieron a un evento de Poilievre en Kirkland Lake, Ontario. Sin embargo, muchas de estas publicaciones fueron generadas por cuentas ubicadas en Rusia, Francia y otros lugares, y compartían mensajes similares.
Investigadores de la Universidad de Concordia y la Universidad de Ottawa realizaron pruebas con varias herramientas de IA generativa disponibles gratuitamente para ver si podían replicar los mensajes políticos observados durante la campaña de bots de julio. Descubrieron que la mayoría de estas plataformas podían generar fácilmente los mensajes solicitados, lo que pone de manifiesto una brecha en el sistema regulatorio actual.
Elizabeth Dubois, profesora de la Universidad de Ottawa y una de las líderes del proyecto, expresó su preocupación por estos hallazgos, señalando que el uso de herramientas de IA para generar mensajes políticos podría comprometer la equidad electoral y las campañas políticas. Aunque algunas plataformas afirman que no permiten el uso de sus herramientas en contextos electorales, la realidad es que la mayoría de ellas lo permiten de todos modos.
El informe también destacó que la campaña de bots que apoyaba a Poilievre parecía ser obra de un aficionado, según los expertos. A pesar de las especulaciones y acusaciones asociadas, no se encontró evidencia de que un partido político o una entidad extranjera estuviera detrás de esta red de bots con fines políticos.
La campaña generó un debate significativo en las redes sociales y en los medios de comunicación, con millones de personas viendo y compartiendo publicaciones que atacaban al Partido Conservador y a Poilievre por intentar engañar a los canadienses sobre su popularidad. Sin embargo, el impacto real de los bots fue considerado insignificante, ya que muy pocos canadienses vieron las publicaciones originales.
En resumen, la reciente campaña de bots que apoyaba a Pierre Poilievre pone de relieve la facilidad con la que se pueden utilizar herramientas de IA para influir en los mensajes políticos en línea. Este fenómeno subraya la necesidad urgente de revisar las regulaciones y estrategias para gestionar el uso de la IA en contextos políticos, con el fin de garantizar la equidad y la integridad de las campañas electorales.