THE LATIN VOX (5 de octubre del 2024).- Por Lallonerd González Serrano
El gobierno de Canadá ha anunciado que convocará a los embajadores extranjeros el próximo mes para subrayar la importancia de evitar cualquier tipo de interferencia en las próximas elecciones federales. Esta medida se produce en medio de la creciente preocupación por la interferencia extranjera en procesos electorales, especialmente tras informes recientes que acusaron a países como China de haber influido en los comicios canadienses de 2019 y 2021.
David Morrison, viceministro de Relaciones Exteriores de Canadá, declaró durante una audiencia en la Comisión de Injerencias Extranjeras que su departamento está preparando un plan exhaustivo para asegurar que las misiones diplomáticas extranjeras comprendan claramente las diferencias entre una influencia legítima y una interferencia inaceptable. «Seremos muy claros sobre lo que consideramos como actividades diplomáticas aceptables y dónde trazamos la línea», afirmó Morrison. El diplomático enfatizó que, aunque la labor de un embajador es influenciar, esta acción se convierte en interferencia cuando implica métodos coercitivos, encubiertos o clandestinos.
Un área de preocupación emergente que destacó Morrison es el uso de inteligencia artificial como herramienta para interferir en las elecciones. Según explicó, se espera que esta tecnología se convierta en un vector de amenaza significativa en los próximos comicios.
La investigación sobre injerencias extranjeras, dirigida por la jueza Marie-Josée Hogue, se estableció después de la publicación de reportes en medios canadienses que señalaban la interferencia de actores extranjeros en las elecciones pasadas. Si bien el informe inicial de la investigación, publicado en mayo de este año, concluyó que no hubo una afectación sustancial en los resultados generales, Morrison advirtió que el gobierno debe tomar medidas preventivas para proteger la integridad del proceso electoral.
Protección de la soberanía electoral y las diásporas en Canadá
Además de prevenir la interferencia extranjera, Morrison enfatizó la necesidad de proteger a las comunidades de la diáspora en Canadá, que podrían ser presionadas por gobiernos extranjeros. Según reportes recientes de inteligencia, varios actores han intentado influir en los resultados políticos mediante tácticas dirigidas a estas comunidades.
El gobierno canadiense también ha solicitado mayor transparencia por parte de los diplomáticos extranjeros y una mejor comprensión por parte de los parlamentarios sobre cómo operan las misiones diplomáticas en el país. Morrison destacó la importancia de proporcionar a los parlamentarios información detallada sobre cómo pueden identificar cuando las acciones de un diplomático cruzan la línea hacia la injerencia en asuntos internos de Canadá.
La investigación sobre interferencia extranjera continuará recibiendo declaraciones de altos funcionarios, con la esperanza de implementar medidas más robustas antes de las próximas elecciones, protegiendo así la integridad democrática del país.