THE LATIN VOX (2 de octubre del 2025).- Por Daniela Medina.
En un movimiento ambicioso para reestructurar su aparato militar y promover la industria de defensa local, el primer ministro Mark Carney anunció la creación de la Agencia de Inversión en Defensa (Defense Investment Agency). Esta nueva entidad buscará centralizar las compras militares, reducir burocracia y acelerar la rearmación canadiense, al mismo tiempo que fortalecerá cadenas de manufactura doméstica. Como cabeza de la agencia fue nombrado Doug Guzman, ejecutivo con décadas de experiencia en el Royal Bank of Canada (RBC).
La medida responde a una promesa de campaña de Carney de revisar profundamente cómo Canadá adquiere equipamiento militar, y canalizarlo como palanca para crecimiento industrial, tecnología y seguridad nacional.
Estructura, mandato y objetivos de la nueva agencia
Funciones principales
Según el comunicado oficial del gobierno, la agencia tendrá los siguientes roles clave:
- Consolidar procesos de adquisición militar, eliminando aprobaciones duplicadas y agilizando aprobaciones.
- Integrar industria, gobierno y fuerzas armadas, para que el diseño y la demanda operativa se alineen mejor desde etapas tempranas.
- Promover la manufactura canadiense, ligando los contratos militares con beneficios industriales locales (empleo, innovación, cadena de suministro nacional).
- Priorizar asociaciones internacionales con aliados como Reino Unido, Australia y Francia, para compras conjuntas y estándares compatibles.
La agencia funcionará bajo el paraguas de Public Services and Procurement Canada y será supervisada por el Secretario de Estado de Adquisiciones de Defensa.
Financiamiento y escala esperada
- El gobierno canadiense prevé que esta agencia impulse compras que respeten objetivos de gasto en defensa equivalentes al 2 % del PIB para este año fiscal, con el propósito de alcanzar un 5 % para 2035.
- Se estima que los programas de defensa, sumados al impulso industrial, involucrarán más de CAD 60 mil millones en inversiones al mediano plazo.
- En su fase inicial, la agencia deberá institucionalizar equipos especializados, reclutar expertos en adquisiciones de defensa y avanzar con los primeros contratos prioritarios.
Perfil de Doug Guzman y su encaje estratégico
Trayectoria profesional
Doug Guzman ha sido una figura prominente en el sector bancario canadiense, destacándose en RBC como alto ejecutivo y anteriormente vinculado a Goldman Sachs. Su experiencia en finanzas, gestión de grandes proyectos y asignación de capital es uno de los argumentos del gobierno para confiarle un papel central en esta transformación industrial-militar.
Ventajas y críticas anticipadas
Ventajas esperadas
- Guzman aporta disciplina financiera y conocimiento para estructurar contratos complejos.
- Su perfil no militar puede estimular una perspectiva más centrada en economía e inversión, además de procurar eficiencia administrativa.
- Como figura externa, puede simbolizar una ruptura con el enfoque tradicional burocrático en defensa.
Críticas posibles
- La falta de experiencia militar directa puede generar escepticismo entre jefes de las Fuerzas Armadas respecto a su sensibilidad operacional.
- Algunos cuestionarán si un ejecutivo bancario está preparado para los desafíos técnicos, logísticos y de seguridad inherentes al equipamiento militar.
- La industria de defensa podría temer una orientación puramente financiera, en detrimento de innovación tecnológica o necesidades operativas reales.
Reacciones políticas, industriales y estratégicas
Aplaudos y reservas en la industria
Varios analistas financieros y empresariales celebraron el anuncio, pues representa una señal clara de que Canadá pretende utilizar el gasto militar no solo para defensa, sino como motor industrial. Sin embargo, otros advierten que sin una ejecución rigurosa, el modelo podría fracasar como otros esquemas de “localización industrial” fallidos.
El banco CIBC, en un análisis, calificó el paso como audaz, pero señaló dudas realistas sobre si hay empresas con capacidad inmediata para asumir la escala de producción requerida, y si hay voluntad privada para asumir riesgos asociados.
Vías de alineación con aliados y estándares globales
Canadá espera alinear esta agencia con prácticas de países aliados que ya cuentan con organismos de adquisiciones militares especializadas, como Reino Unido, Australia o Francia. Esta armonización facilitaría compras conjuntas y estándares compatibles.
Además, la agencia podría desempeñar un papel central en iniciativas de defensa colectiva, como la Iniciativa “Readiness 2030” de la UE, dadas las ya propuestas colaboraciones internacionales.
Riesgos políticos y económicos
- Si la agencia no cumple con plazos ni resultados tangibles, puede enfrentar críticas severas de la oposición por el uso del gasto público.
- La tensión entre priorizar industria nacional y niveles de defensa eficientes podría generar presiones contradictorias.
- La construcción rápida de capacidades militares locales requiere inversiones tempranas que podrían tensionar el presupuesto federal si los ingresos fiscales no acompañan.
Escenarios futuros y desafíos a superar
- Éxito inicial con contratos y cadenas integradas
Si en los primeros años la agencia logra adjudicar contratos importantes y movilizar industria canadiense competitiva, podría consolidarse como modelo de defensa-producto nacional. - Retrasos, sobrecostos o fallas en ejecución
La falta de experiencia operativa, evaluación de riesgos o coordinación entre industria y fuerzas armadas podría ocasionar sobrecostos, retrasos o productos que no satisfacen requisitos militares. - Colaboraciones con empresas extranjeras
Para acelerar producción, la agencia podría asociarse con compañías internacionales, aunque eso choca con la lógica de “industrialización local”. El equilibrio será delicado. - Reformas institucionales y ajustes legales
Podrían requerirse leyes nuevas o modificaciones en adquisiciones federales, normas de defensa, financiamiento público, para dotarla de autoridad suficiente y flexibilidad regulatoria. - Presión política, escrutinio público y supervisión legislativa
El Parlamento y partidos opositores seguirán de cerca la efectividad. Fallos iniciales podrían provocar auditorías, comisiones parlamentarias o reproches públicos.
Contexto estratégico: por qué este momento es crítico
- Canadá ha reconocido que su sistema actual de compras militares es fragmentado, burocrático y lento, lo que ha llevado a que las Fuerzas Armadas esperen años por equipamiento esencial.
- En un entorno global creciente de competencia estratégica, Canadá busca afirmarse como actor confiable en defensa, apoyando su soberanía y aportando capacidades conjuntas a alianzas militares.
- Además, al fortalecer la industria nacional de defensa, el gobierno apunta a generar empleos calificados, innovación tecnológica y mayor resiliencia ante disrupciones globales en cadenas de suministro.
La creación de la Agencia de Inversión en Defensa señala una nueva era para la política militar canadiense: una fusión explícita entre defensa, industria y economía nacional. Que Doug Guzman, un hombre de finanzas, lidere este experimento es una apuesta audaz que combinará eficiencia económica con retos técnicos.
El éxito dependerá de la sincronía entre administración, fuerzas armadas e industria local. Si logra acelerar adquisiciones, fortalecer cadenas productivas y ofrecer resultados tangibles para la nación, marcará un hito en la historia de la defensa canadiense. Si fracasa, puede convertirse en un costoso experimento mal conducido. En todo caso, el mundo observará cómo Canadá combina seguridad, industria y soberanía en un solo organismo nuevo.
Fuente: /www.bloomberg.com
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