El gobierno de Canadá ha anunciado una inversión de 4 millones de dólares canadienses para apoyar la gobernabilidad internacional en el sector minero, con el objetivo de promover el desarrollo sostenible, la transparencia y el respeto de los derechos humanos.
La iniciativa, que se enmarca en el programa IMPACT (Iniciativa para la Minería, el Desarrollo y la Participación), se desarrollará en colaboración con la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y la Iniciativa para la Transparencia de las Industrias Extractivas (EITI).
El ministro de Desarrollo Internacional de Canadá, Karina Gould, ha declarado que la minería responsable es clave para el crecimiento económico y la reducción de la pobreza en muchos países, y que Canadá está comprometido con el fortalecimiento de las capacidades de los gobiernos y las comunidades locales para gestionar los recursos naturales de manera eficaz y equitativa.
La inversión se distribuirá en tres proyectos:
- El primero, con un monto de 1,5 millones de dólares, apoyará la implementación de las Directrices de la OCDE para las Empresas Multinacionales en el sector minero, que establecen los estándares internacionales para la conducta empresarial responsable en materia de derechos humanos, medio ambiente, anticorrupción y otros aspectos.
- El segundo, con un monto de 1,3 millones de dólares, respaldará la participación de la sociedad civil en el proceso de la EITI, que promueve la divulgación y la verificación de la información sobre los ingresos y los beneficios generados por la explotación de los recursos minerales, petroleros y gasíferos.
- El tercero, con un monto de 1,2 millones de dólares, facilitará el intercambio de experiencias y buenas prácticas entre los países miembros de la EITI, especialmente en América Latina, África y Asia, para mejorar la gobernabilidad y la rendición de cuentas en el sector extractivo.
Con esta inversión, Canadá busca contribuir a la mejora de la gobernabilidad internacional en la minería, un sector en el que el país tiene una presencia destacada, con más de 1.200 empresas que operan en más de 100 países. Según el gobierno canadiense, la minería responsable puede generar beneficios sociales, ambientales y económicos para las poblaciones locales y los países anfitriones.