En un esfuerzo significativo para abordar la crisis humanitaria en Líbano, el gobierno de Canadá ha anunciado una contribución de $10 millones en asistencia humanitaria. Esta medida se produce en medio del conflicto en curso entre Israel y Hezbollah, que ha exacerbado las condiciones de vida de los civiles en la región.
El Ministro de Desarrollo Internacional de Canadá, Ahmed Hussen, declaró que los fondos se destinarán a proporcionar alimentos, agua y atención médica de emergencia, incluyendo atención de salud sexual y reproductiva. “Canadá está profundamente preocupado por el impacto del conflicto en los civiles y estamos comprometidos a apoyar a las comunidades afectadas”, afirmó Hussen en un comunicado de prensa.
La asistencia de Canadá se suma a los esfuerzos internacionales para aliviar el sufrimiento de los civiles en Líbano. La ONU ya ha asignado $10 millones adicionales a la crisis en Líbano a través del Fondo Central de Respuesta a Emergencias, del cual Canadá es un donante significativo.
Esta contribución es parte de un compromiso más amplio de Canadá para apoyar la estabilidad y la seguridad en la región. Además de la asistencia humanitaria, Canadá también está trabajando con socios internacionales para encontrar soluciones diplomáticas al conflicto y promover la paz y la seguridad a largo plazo.
El anuncio ha sido bien recibido por organizaciones humanitarias que operan en Líbano, quienes han destacado la necesidad urgente de recursos adicionales para atender a las poblaciones vulnerables. “Esta ayuda es crucial para nuestras operaciones en el terreno y permitirá salvar vidas y aliviar el sufrimiento de miles de personas”, comentó un representante de una ONG local.
La contribución de $10 millones de Canadá representa un paso importante en la respuesta internacional a la crisis humanitaria en Líbano, subrayando el compromiso continuo del país con la asistencia global y la promoción de la paz y la seguridad en regiones afectadas por conflictos.