Un hombre de Canadá ha sido acusado de suministrar una sustancia letal a personas en decenas de países, incluyendo a cuatro personas que se quitaron la vida en el Reino Unido y una en Estados Unidos. Kenneth Law, de 57 años, fue acusado de dos cargos de asesoramiento o ayuda para el suicidio relacionados con adultos canadienses. Law, quien trabajaba como ingeniero aeroespacial en una cocina de hotel de alta gama, supuestamente dirigió un negocio en línea que vendía una sustancia a clientes en el Reino Unido y Estados Unidos. Se cree que sus envíos están vinculados a al menos siete muertes, incluyendo cuatro ciudadanos británicos y un adolescente estadounidense.
La policía regional de Peel ha estado trabajando en el caso y, según su investigación, al menos 1.200 paquetes han sido enviados a más de 40 países. La policía también ha dicho que está colaborando con otras fuerzas policiales en Ontario, a nivel nacional e internacional, incluyendo la Agencia Nacional del Crimen del Reino Unido. Law también está relacionado con otras empresas como Imtime Cuisine, AmbuCA, Academic/ACademic, Escape Mode/escMode e ICemac.
Bajo el código penal de Canadá, cualquier persona que «aconseje o incite» a una persona a suicidarse puede enfrentar hasta 14 años de prisión. En una conferencia de prensa, el jefe adjunto de policía Marc Andrews declaró que la salud mental y el bienestar de las comunidades es su principal prioridad y que no tolerarán acciones criminales por parte de aquellos que se aprovechan de personas vulnerables en la comunidad.
La venta de sustancias letales ha sido objeto de debate en el Reino Unido, donde un informe de un forense sobre la muerte de Neha Susan Raju, una mujer de 23 años de Guildford, Surrey, encontrada muerta en su habitación con una nota de suicidio en abril de 2022, ha generado preocupación. En el informe se advierte que no se ofrece protección a las personas vulnerables antes de que realicen estas compras y que se pueden enviar cantidades letales libremente en el Reino Unido. Actualmente, Amazon se enfrenta a una demanda de las familias que alegan que la empresa vendió «kits de suicidio», incluyendo sustancias letales y un libro sobre el suicidio.
Law, quien vive en la ciudad de Markham, en el área de Toronto, ha negado las acusaciones de que vendía productos para ayudar a las personas a morir por suicidio. Su empresa de venta por correo fue desactivada después de la investigación realizada por The Times. Law comparecerá ante el tribunal para una audiencia de fianza el miércoles. La policía ha emitido una alerta pública pidiendo a las personas que estén atentas a transacciones o paquetes con los nombres de las empresas relacionadas con Law.