
El mercado laboral canadiense sorprendió en enero con la creación de 76,000 nuevos puestos de trabajo, reduciendo la tasa de desempleo al 6.6%, según informó Statistics Canada este viernes. Estos resultados superaron ampliamente las expectativas de los economistas, quienes preveían un aumento del desempleo y la creación de solo un tercio de esos empleos.
El sólido desempeño laboral ha generado dudas sobre si el Banco de Canadá reducirá las tasas de interés en su próxima reunión en marzo. Algunos expertos, como Derek Holt, vicepresidente y jefe de economía de mercados de capitales de Scotiabank, señalan que la economía muestra un «impulso serio» que podría elevar el umbral para considerar futuros recortes en las tasas de interés.
El sector manufacturero fue el mayor responsable de la creación de empleos en enero, sumando 33,000 nuevos puestos, con un tercio de ellos concentrados en Ontario. Statistics Canada subrayó la importancia del comercio con Estados Unidos, ya que el 40% de los 1.9 millones de empleos en manufactura dependen de la demanda estadounidense. En la industria automotriz, esta dependencia asciende al 70%.
Este repunte laboral ocurre en medio de crecientes tensiones comerciales con Estados Unidos. El presidente Donald Trump ha amenazado con imponer un arancel del 25% a todas las importaciones canadienses, aunque recientemente pausó la medida por un mes tras compromisos del gobierno canadiense para reforzar la lucha contra el tráfico de fentanilo.
«Tal vez Donald Trump está haciendo que el mercado laboral de Canadá sea fuerte de nuevo», bromeó Holt al analizar el posible impacto de la incertidumbre comercial en las decisiones de contratación.
La fortaleza del mercado laboral en enero contrasta con la desaceleración de los salarios, que crecieron un 3.5% interanual, por debajo del 4% registrado en diciembre. Además, la inflación anual se ubicó en 1.8% en diciembre, lo que da margen al Banco de Canadá para mantener estables las tasas de interés en caso de que surjan nuevos riesgos económicos.
Nathan Janzen, economista asistente en RBC, destacó que el Banco de Canadá había señalado en enero que cualquier recorte de tasas dependería de datos económicos débiles. «Con un mercado laboral tan fuerte, las probabilidades de que se posponga un recorte en marzo han aumentado», afirmó.
Por otro lado, Andrew Grantham, economista senior en CIBC Capital Markets, sostuvo que aún se necesitan tasas de interés más bajas para reducir el desempleo. «El mercado laboral todavía tiene margen de recuperación», señaló en una nota a clientes.
El Banco de Canadá tendrá más datos económicos para analizar antes de su próxima reunión del 12 de marzo, incluyendo el reporte de inflación de enero, que se publicará el 18 de febrero.
Royce Mendes, director general y jefe de estrategia macroeconómica en Desjardins, sugirió que si no se implementan nuevos aranceles antes de marzo, el banco central podría mantener las tasas sin cambios. «La buena noticia es que los banqueros centrales tienen flexibilidad para reaccionar si se produce un shock en la economía», explicó.
Mientras tanto, los mercados financieros han reaccionado con una apreciación del dólar canadiense y un aumento en las tasas de los bonos gubernamentales, reflejando el optimismo generado por los sólidos datos de empleo.
La pregunta clave ahora es si esta tendencia de crecimiento laboral se mantendrá en los próximos meses o si la incertidumbre comercial y la política monetaria más restrictiva enfriarán el mercado. La próxima decisión del Banco de Canadá será crucial para definir el rumbo económico del país en 2024.