Canadá es un país con una gran riqueza natural y una fuerte conciencia ambiental. Estas características lo convierten en un candidato ideal para liderar el desarrollo y la implementación de tecnologías de captura y eliminación de carbono (CDR, por sus siglas en inglés), que son esenciales para alcanzar la neutralidad de carbono y evitar los peores efectos del cambio climático.
Las tecnologías de CDR consisten en extraer el dióxido de carbono (CO2) de la atmósfera o de fuentes puntuales, como las chimeneas industriales, y almacenarlo de forma permanente o utilizarlo para crear productos de valor añadido. Algunos ejemplos de CDR son la reforestación, la bioenergía con captura y almacenamiento de carbono (BECCS), la mineralización del CO2, la captura directa de aire (DAC) y la inyección de CO2 en formaciones geológicas.
Canadá tiene varias ventajas competitivas para impulsar la innovación y el despliegue de CDR, como:
- Una gran superficie forestal que puede absorber y almacenar grandes cantidades de CO2.
- Una industria energética diversificada y con experiencia en la captura y el transporte de CO2.
- Una geología favorable para el almacenamiento subterráneo de CO2, especialmente en las provincias de Alberta y Saskatchewan.
- Una red de investigación y desarrollo (I+D) de primer nivel, con centros de excelencia como el Instituto Canadiense de Captura y Almacenamiento de Carbono o el Centro de Investigación y Desarrollo de Carbono Negativo.
- Un marco regulatorio y de incentivos que fomenta la inversión y la colaboración en CDR, como el Fondo de Innovación en Bajas Emisiones o el Crédito Fiscal para la Captura y Almacenamiento de Carbono.
Además, Canadá tiene la oportunidad de convertirse en un exportador de CDR, ofreciendo sus servicios y productos a otros países que necesiten reducir sus emisiones de CO2. Esto podría generar beneficios económicos y sociales para los canadienses, así como contribuir a la lucha global contra el cambio climático.
En conclusión, Canadá tiene el potencial y la voluntad de convertirse en una superpotencia de CDR, aprovechando sus recursos naturales, su capacidad tecnológica y su compromiso ambiental. Sin embargo, para lograrlo, se requiere una mayor inversión, cooperación y liderazgo, tanto a nivel nacional como internacional.