Carney anuncia proyecto de ley para endurecer las normas de libertad bajo fianza y reforzar sanciones contra delincuentes violentos

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THE LATIN VOX (16 de octubre del 2025).- Por Daniela Medina.

El primer ministro Mark Carney anunció esta semana que el gobierno federal presentará muy pronto una iniciativa legislativa para modificar las leyes de fianza en Canadá, endureciendo las condiciones bajo las cuales pueden otorgarse liberaciones anticipadas, especialmente para quienes están acusados de delitos violentos. La propuesta incluirá, además, la posibilidad de imponer penas consecutivas para reincidentes, de modo que no puedan cumplirse múltiples condenas al mismo tiempo.

“Queremos asegurarnos de que quienes representen un peligro serio para la comunidad no estén en la calle simplemente por errores procesales”, afirmó Carney durante una conferencia de prensa, al tiempo que señaló que esta reforma buscará restaurar la confianza pública en el sistema judicial.

Motivos del cambio: contexto de inseguridad y presión política

Creciente demanda de mano dura

En los últimos meses, el debate público en Canadá ha estado marcado por preocupaciones sobre el aumento de crímenes violentos, robos de autos y delitos con armas, lo que ha generado presión política para que el gobierno federal muestre respuesta contundente. Bajo ese ambiente, la reforma del régimen de fianzas aparece como un símbolo de acción en materia de seguridad.

Carney adelantó que la futura ley buscará dificultar la concesión de fianzas para acusados por robo automotor con violencia, tráfico de personas, agresión agravada y delincuencia organizada. Esa restricción será parte central de la propuesta.

Consecuencias prácticas de permitir fianzas laxas

El primer ministro y sus colaboradores han argumentado que un sistema de fianzas demasiado permisivo ha permitido que personas que representan riesgo real vuelvan a cometer delitos mientras esperan juicio. Esa percepción cierta o no ha generado desconfianza en el sistema judicial entre parte del electorado.

Asimismo, la reforma busca que quienes reincidan en delitos violentos no puedan beneficiarse de fianzas fáciles o reducciones automáticas de condena, al impedir que las penas se solapen injustamente. Es decir: si una persona es condenada por dos delitos violentos distintos, deberá cumplir ambas sanciones de forma sucesiva, no en paralelo.

Contenido anticipado de la reforma: claves previstas

Según los anuncios preliminares:

  • Las condiciones para otorgar fianza serán más estrictas si el acusado presenta antecedentes o si el delito es violento.
  • Se permitirán penas consecutivas para infractores reincidentes, para hacer más drásticas las consecuencias legales.
  • Se ampliarán los criterios que los jueces pueden considerar al evaluar el riesgo que representa liberar a alguien anticipadamente (peligro para la comunidad, antecedentes, grado de violencia).
  • El gobierno incluirá disposiciones para acelerar la tramitación de casos penales relacionados con delitos violentos, de modo de no prolongar innecesariamente la espera en libertad.
  • La medida podría incluir mecanismos para supervisión más estricta de quienes queden bajo fianza (restrictivas condiciones de reporte, vigilancia electrónica, restricciones de movimiento).

Reacciones políticas y preocupaciones legales

Críticas de la oposición

Partidos opositores especialmente el NDP y partidos provinciales más progresistas— han advertido que endurecer las fianzas podría ocasionar violaciones a derechos fundamentales, como la presunción de inocencia. También han señalado que el problema real muchas veces no está en la ley de fianza, sino en la capacidad operativa del sistema judicial (infraestructura, número de jueces, recursos).

Algunos legisladores han cuestionado que, sin mejoras en la justicia penal, la policía y los tribunales, esta reforma corre el riesgo de convertirse en un acto simbólico con impacto limitado.

Expertos legales

Abogados criminalistas han manifestado preocupación de que una ley más rígida de fianzas podría saturar las cárceles preventivas, aumentando el número de detenidos que esperan juicio, lo cual tiene implicaciones de costos y derechos humanos. También advierten que los jueces perderían discrecionalidad para manejar casos menos graves o atenuantes que no representen riesgo real.

Por su parte, defensores de víctimas y asociaciones de seguridad pública han expresado respaldo, diciendo que reformas así pueden generar disuasión frente a quienes cometen delitos violentos y evitar reincidencias mientras esperan juicio.

Desafíos para implementación y ejecución

  1. Capacidad judicial y recursos federales
    Reformar la ley de fianzas exige que los tribunales, fiscales y defensores públicos estén equipados para procesar más rápido los casos. Si no se fortalecen esas instancias, los retrasos actuales podrían agravarse.
  2. Supervisión de bailes con condiciones estrictas
    Si se permiten fianzas pero con vigilancia electrónica u otras restricciones, deberá garantizarse que esos mecanismos funcionen correctamente.
  3. Efecto en la población carcelaria preventiva
    Si la nueva norma impide liberaciones anticipadas, muchas personas detenidas podrían pasar más tiempo en prisión preventiva aún antes del juicio, lo que puede generar costos elevados y problemas de derechos.
  4. Desigualdad regional
    En provincias o territorios con recursos judiciales limitados, la reforma podría tener efectos desproporcionados, exacerbando la desigualdad en el acceso a defensa o juicios rápidos.
  5. Aceptación política y riesgo de polarización
    La reforma puede dividir la opinión pública: mientras algunas comunidades exigieron mano dura, otros sectores temen abusos institucionales o que se dañe el principio de justicia imparcial.

Importancia nacional e implicaciones internacionales

Este proyecto de ley no es un tema menor: representa una señal política clara del gobierno Carney de que la lucha contra el crimen violento tendrá un lugar central en su mandato. En el contexto global, muchos países enfrentan el dilema entre reforzar la seguridad y respetar libertades civiles. La reforma canadiense puede convertirse en referente comparado para naciones que buscan mejorar su sistema penal.

Además, la propuesta podría influir en percepciones sobre la gobernabilidad de Canadá: una bancada que avanza en reformas en seguridad podría capitalizar políticamente, pero también puede enfrentar movilizaciones contrarias si se percibe como excesiva.

Fuente: www.theglobeandmail.com

Foto: Google fotos


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