THE LATIN VOX (11 de enero del 2025).- Por Francisco Javier Valdiviezo Cruz.
En un giro inesperado, la ministra de Asuntos Exteriores de Canadá, Mélanie Joly, ha decidido no lanzarse a la carrera por la jefatura del Partido Liberal de Canadá (PLC), dejando la puerta abierta para otros contendientes.
Su retiro de la contienda se produce tras una serie de declaraciones en las que inicialmente dejó abierta la posibilidad de postularse. Ahora, la atención se centra en Mark Carney, el exgobernador del Banco de Canadá, quien se prepara para anunciar su candidatura la próxima semana.
Joly, quien durante los últimos días había estado sopesando la idea de convertirse en la primera mujer en liderar el PLC, explicó que prefiere concentrarse en las negociaciones clave con la administración entrante de Estados Unidos, particularmente sobre la amenaza de tarifas arancelarias que el presidente electo, Donald Trump, ha señalado.
«Es un trabajo crucial para asegurar una solución ganadora tanto para Canadá como para nuestros socios estadounidenses», comentó Joly, aludiendo a los temas de defensa y geopolítica que aún deben abordarse.
La ministra también dejó claro que continuará representando su circunscripción de Ahuntsic-Cartierville en el Parlamento, una decisión que refuerza su compromiso con el trabajo legislativo en lugar de embarcarse en una campaña por la jefatura del partido. Si bien reconoció que su decisión de no postularse se debía en parte a la falta de tiempo para preparar una campaña efectiva, Joly subrayó que las circunstancias no le permitirían crear las condiciones necesarias para una campaña exitosa.
Por su parte, Mark Carney, quien desde el verano pasado ha sido asesor económico del Partido Liberal, parece estar tomando ventaja en esta competencia interna. Según fuentes cercanas a Carney, su equipo espera lanzar oficialmente su campaña en los próximos días.
Un respaldo significativo parece estar asegurado, con más de 30 diputados del caucus liberal ya comprometidos con su candidatura. Carney, con una amplia trayectoria en el sector financiero y una visibilidad internacional como exgobernador del Banco de Canadá y del Banco de Inglaterra, se perfila como uno de los favoritos para suceder a Justin Trudeau.
La sorpresiva retirada de Joly se suma a la de otros miembros clave del gabinete liberal, como el ministro de Finanzas, Dominic LeBlanc, quien también anunció que no buscará la jefatura del PLC. Esta serie de renuncias ha dejado el camino más despejado para figuras como Carney, mientras que otros miembros del gobierno, como el ministro de Industria, François-Philippe Champagne, también están sopesando la posibilidad de entrar en la contienda.
El futuro del PLC está en juego, ya que el sucesor de Trudeau no solo liderará el partido, sino que asumirá el cargo de primer ministro de Canadá, aunque su mandato podría ser corto debido a la presión de los partidos de oposición, que han prometido hacer caer al gobierno liberal tan pronto como sea posible tras el regreso al Parlamento.
Con solo unas semanas para las elecciones internas, los aspirantes deberán inscribirse y pagar una cuota de 350,000 dólares canadienses antes del 23 de enero. A pesar de la fuerte competencia que se perfila, la carrera por la sucesión de Trudeau ya ha comenzado a tomar forma, con otros posibles candidatos como la ex primera ministra de la Columbia Británica, Christy Clark, y varios miembros del gabinete federal, incluyendo a Steven MacKinnon y Jonathan Wilkinson.
Mientras tanto, la posible candidatura de Chrystia Freeland, exministra de Finanzas y una de las figuras más destacadas del gobierno de Trudeau, sigue siendo una incógnita, tras su renuncia al caucus liberal el mes pasado. Además, se ha especulado sobre la candidatura de Karina Gould, diputada liberal de Ontario, quien también podría entrar en la contienda.
Aunque los contendientes se preparan para la batalla, la pregunta que sigue en el aire es quién será capaz de atraer al electorado liberal y gestionar la crisis política y económica que atraviesa Canadá en este momento. El Partido Liberal se encuentra en una encrucijada crucial, y la elección de su nuevo líder podría determinar el rumbo del país durante los próximos años.
Con las elecciones para la jefatura del PLC programadas para el 9 de marzo, el proceso de sucesión se está acelerando, y será interesante ver cómo los diversos aspirantes logran movilizar tanto a las bases del partido como al electorado canadiense en este crucial momento político.
Crédito fotográfico: Agencias