Casey Stoney, ex capitana de la selección inglesa, ha sido nombrada entrenadora en jefe de la selección nacional femenina de Canadá. Este nombramiento se produce tras la suspensión de la anterior entrenadora, Bev Priestman, debido a un escándalo relacionado con el uso de drones para espiar entrenamientos de Nueva Zelanda durante los Juegos Olímpicos de París.
Stoney, de 42 años, cuenta con una destacada trayectoria tanto como jugadora como entrenadora. Recientemente, dirigió al equipo San Diego Wave de la National Women’s Soccer League (NWSL), donde fue reconocida como Entrenadora del Año en 2022.
Bajo su liderazgo, el equipo alcanzó importantes logros, consolidándose como una de las franquicias más competitivas de la liga.
La Federación Canadiense de Fútbol expresó su confianza en que Stoney aportará una nueva visión y fortalecerá al equipo nacional femenino, que ha enfrentado desafíos recientes. El escándalo de los drones resultó en una deducción de seis puntos durante los Juegos Olímpicos de París; sin embargo, el equipo logró avanzar hasta los cuartos de final, demostrando resiliencia y determinación.
En sus primeras declaraciones como entrenadora de Canadá, Stoney manifestó su entusiasmo por asumir este nuevo desafío y su compromiso con el desarrollo del fútbol femenino en el país. «Junto con el nuevo liderazgo de la federación, buscaremos construir sobre los éxitos pasados y continuar creciendo el deporte en Canadá, tanto dentro como fuera del campo», afirmó.
Se espera que Stoney debute como entrenadora del equipo canadiense en la Pinatar Cup, un torneo internacional que se llevará a cabo en España el próximo mes. Este evento servirá como una oportunidad para evaluar al equipo y comenzar a implementar su filosofía de juego de cara a futuras competencias internacionales.
La comunidad futbolística canadiense ha recibido el nombramiento de Stoney con optimismo, viendo en ella una líder capaz de guiar al equipo hacia nuevos éxitos y superar las controversias recientes. Su experiencia y dedicación al avance del fútbol femenino son vistas como activos valiosos para el futuro de la selección nacional.