THE LATIN VOX (25 de octubre del 2025).- Por Daniela Medina.
Este fin de semana, las céntricas avenidas de Montréal se convirtieron en escenario de una manifestación que reunió a cientos de personas reclamando la independencia de la provincia de Québec. Bajo consignas que apelaban al derecho de autodeterminación, al rescate del idioma francés y a una visión de futuro distinta de la relación con el resto de Canadá, los manifestantes protagonizaron una marcha que, aunque pacífica, dejó ver la persistencia del movimiento soberanista en la sociedad quebequesa.
Datos clave del evento
La movilización, llevada a cabo el sábado por la tarde, congregó a grupos de diversas ciudades del área metropolitana de Montréal, en un recorrido que partió de la Place du Canada para avanzar por la avenida Sainte-Catherine y concluir frente al edificio del Parlamento provincial en Québec (según lo programado). La organización estimó la asistencia en varias centenas, aunque fuentes oficiales aún no han dado una cifra precisa.
Las consignas más repetidas incluyeron “Québec libre”, “Notre langue, notre pays” (“Nuestro idioma, nuestro país”) y “Un peuple, un pays”. Parte del mensaje llamaba a un referéndum sobre la soberanía dentro de un plazo de cinco años, bajo la lógica de que el statu quo ya no responde a las aspiraciones de muchos quebequeses.
Contexto histórico y político
El movimiento por la independencia de Québec no es nuevo. Ya en 1980 y 1995 la provincia celebró referéndums sobre la soberanía ambos derrotados, pero la cuestión ha seguido viva en la política y la identidad quebequesa.
La marcha de este sábado refleja esta persistencia, en un momento en que nuevos factores como el envejecimiento demográfico, el reto del francés en una sociedad angloparlante de Norteamérica y la globalización económica reavivan los debates sobre el autogobierno provincial y la identidad cultural.
¿Qué motiva esta manifestación ahora?
Varios factores explican por qué el soberanismo vuelve a cobrar visibilidad:
- Temor por el idioma y la cultura: Aun cuando Québec mantiene un estatus especial, muchos ven que el francés pierde terreno frente al inglés y que la globalización cultural erosiona la identidad local.
- Factores económicos y fiscales: Algunos sectores consideran que Québec podría prosperar mejor fuera de las estructuras federales canadienses, manejar sus propios recursos y definir sus políticas sin ceder ante Ottawa.
- Descontento político: Protestas como esta también funcionan como válvula de expresión para partes de la población que estiman que sus demandas no están siendo escuchadas en la esfera provincial o federal.
- Inspiración internacional: En un mundo donde los movimientos de autodeterminación han ganado protagonismo, algunos soberanistas quebequeses se sienten alentados a reactivar sus propuestas.
Reacciones de los actores clave
- El gobierno provincial de Québec llamó al diálogo, señalando que respeta el derecho a manifestarse, pero advirtió que en este momento no contempla una nueva consulta sobre la independencia.
- El gobierno federal de Canadá recordó que la Constitución canadiense no prevé mecanismos automáticos para la secesión, y que cualquier cambio de tal magnitud requeriría negociaciones complejas y amplios consensos.
- La prensa local destacó que, aunque la marcha no alcanzó los números de los grandes movimientos de años anteriores, sí envió un mensaje claro: el deseo de autogobierno no ha desaparecido.
- Expertos en sociología quebequesa apuntan que esta movilización puede ser interpretada tanto como un llamado simbólico sin expectativas inmediatas de secesión— como un termómetro del nivel de inquietud cultural que todavía persiste.
Implicaciones y preguntas en el horizonte
- ¿Referéndum en puerta? La manifestación reabre la pregunta de si los partidos soberanistas tratarán de poner la independencia en la agenda electoral de Québec.
- Impacto en inversiones y economía: Una mayor retórica soberanista puede repercutir en la percepción de estabilidad para los negocios en la provincia, lo cual preocupa a algunos sectores económicos.
- Relación con el resto de Canadá: El resurgimiento de estas movilizaciones puede tensar aún más la relación Québec-Ottawa, y abrir debates sobre distribución de recursos, competencias y control fiscal.
- Dinámicas demográficas: En Québec existe una combinación de francófonos tradicionales, inmigrantes recientes, anglófonos y comunidades indígenas; la movilización soberanista debe articularse en ese contexto plural para ser viable.
La marcha de este sábado en Montréal no fue una explosión masiva, pero sí un significativo recordatorio de que el sueño de la independencia de Québec sigue vivo para un segmento de la población. Entre pancartas que reclamaban “un país para un pueblo” y discursos sobre autonomía, la manifestación volvió a situar la cuestión soberanista en la agenda pública.
En una época marcada por la globalización, los retos culturales y las tensiones identitarias, Québec vuelve a explorar aunque de manera pacífica y simbólica la idea de un futuro distinto. El desenlace de esta nueva pulsión soberanista dependerá de la capacidad de sus actores para convertir el deseo en política, y del entorno federal, provincial y económico para adaptarse o responder al llamado.
Fuente: www.ctvnews.ca
Foto: Google fotos