Cinco años después de la publicación del informe final de la investigación sobre mujeres, niñas y personas de género diverso desaparecidas y asesinadas (MMIWG, por sus siglas en inglés), los ex comisionados aún aguardan avances significativos. A pesar de los llamados a la acción y las recomendaciones detalladas presentadas en el informe, los esfuerzos para abordar la crisis continúan estancados, lo que genera frustración y descontento entre aquellos que han dedicado tiempo y energía a la búsqueda de justicia y verdad. La falta de progreso ha avivado críticas hacia el gobierno y las instituciones responsables de implementar las medidas propuestas.
Los ex comisionados expresan su decepción por la falta de acción concreta para abordar las preocupaciones y desafíos identificados en el informe. A pesar de los compromisos iniciales y las promesas de cambio, el ritmo lento de implementación ha dejado a muchas comunidades indígenas y a los familiares de las víctimas sintiéndose ignorados y abandonados. La persistente falta de recursos, coordinación y voluntad política para abordar la crisis sigue siendo un obstáculo significativo en el camino hacia la justicia y la reconciliación.
La demora en la implementación de las recomendaciones del informe ha llevado a un aumento en la presión sobre el gobierno y otras partes interesadas para tomar medidas concretas y significativas. Las voces de los sobrevivientes, familiares y defensores continúan exigiendo medidas urgentes para abordar la violencia y la discriminación contra las mujeres indígenas y de género diverso. La falta de avances también ha renovado el llamado a un compromiso renovado y sostenido para abordar las raíces profundas de la crisis y garantizar la seguridad y el bienestar de todas las personas afectadas.