El nuevo primer ministro de Canadá, Mark Carney, ha tomado una decisión trascendental al eliminar el impuesto al carbono a nivel nacional, una medida que ha generado diversas reacciones en todo el país. En consonancia con esta política, la provincia de Columbia Británica ha decidido suprimir su propio impuesto al carbono, vigente desde 2008.
El impuesto al carbono de Columbia Británica se implementó con el objetivo de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, comenzando con una tasa de $10 por tonelada en 2008 y alcanzando $30 por tonelada en 2012. Durante este período, la economía de la provincia creció aproximadamente un 12%, superando el promedio nacional, mientras que las emisiones per cápita disminuyeron cerca del 10%.
La reciente eliminación del impuesto ha suscitado un debate entre los ciudadanos y expertos. Algunos argumentan que, en teoría, la ausencia del impuesto permitirá a las empresas reducir sus precios para competir, beneficiando a los consumidores. Sin embargo, otros son escépticos y creen que las empresas podrían mantener los precios actuales y absorber la diferencia como ganancia adicional.
Además, la eliminación del impuesto plantea interrogantes sobre el futuro de programas financiados con estos ingresos, como el Fondo de la Industria CleanBC, que invertía en iniciativas para reducir las emisiones en sectores como minería, pulpa y papel, cemento, agricultura y petróleo y gas.
Mientras tanto, una encuesta reciente de Castanet.net pregunta a los ciudadanos si consideran acertada la decisión de Columbia Británica de seguir el ejemplo federal y eliminar el impuesto al carbono. Los resultados reflejan una división de opiniones, evidenciando la complejidad y las diversas perspectivas en torno a esta política ambiental y económica.
La decisión de eliminar el impuesto al carbono representa un cambio significativo en la estrategia de Canadá y Columbia Británica para abordar el cambio climático. Será fundamental observar cómo esta medida afectará las emisiones de gases de efecto invernadero, la economía y las políticas ambientales en el futuro cercano.