En un juicio que ha captado la atención internacional, dos hombres han sido declarados culpables de tráfico de personas y homicidio culposo en relación con la trágica muerte de una familia india en la frontera entre Estados Unidos y Canadá. Harshkumar Ramanlal Patel y Steve Anthony Shand fueron encontrados culpables de todos los cargos, incluyendo tráfico de personas, conspiración criminal y homicidio culposo no equivalente a asesinato. Ambos se enfrentan a penas de hasta 55 años de prisión.
El caso se centra en la muerte de la familia Patel, cuyos cuerpos fueron encontrados congelados en un campo de Manitoba, Canadá, a solo 12 metros de la frontera con Estados Unidos en enero de 2022. La familia, compuesta por Vaishaliben Patel, su esposo Jagdish y sus dos hijos pequeños, Vihangi de 11 años y Dharmik de 3 años, intentaba cruzar la frontera en medio de una tormenta de nieve con temperaturas de hasta -35°C.
El juicio reveló detalles escalofriantes sobre las operaciones de tráfico de personas que facilitan el movimiento ilegal de extranjeros hacia América del Norte. Patel, conocido como «Dirty Harry», y Shand, fueron parte de una red de tráfico de personas que traía a ciudadanos indios a Canadá con visas de estudiante y luego los pasaba de contrabando a Estados Unidos. Durante el juicio, se presentaron mensajes de texto entre los acusados discutiendo la logística de los viajes y las temperaturas extremas del día del trágico cruce.
El fiscal adjunto de EE.UU., Michael McBride, argumentó que mientras la familia Patel «moría lentamente en el frío», Shand estaba sentado en su cálida furgoneta sin hacer nada para ayudar, y Patel enviaba mensajes desde la soleada Florida. «Durante semanas, sabían que el frío mataría, pero decidieron que su ganancia era más importante que estas vidas humanas», dijo McBride al jurado.
La defensa de Shand argumentó que él fue reclutado por Patel y era un «participante involuntario» en la empresa de contrabando, mientras que los abogados de Patel afirmaron que su cliente fue identificado erróneamente y no era el hombre involucrado en los mensajes de texto presentados como evidencia.
El veredicto del jurado, alcanzado después de unas pocas horas de deliberación, subraya la crueldad inimaginable del tráfico de personas y las organizaciones criminales que valoran el lucro por encima de la humanidad. La sentencia de Patel y Shand se llevará a cabo en una fecha posterior.
Este caso destaca los peligros extremos que enfrentan los migrantes y la necesidad urgente de abordar las redes de tráfico de personas que operan a nivel internacional. Las autoridades continúan trabajando para desmantelar estas redes y llevar a los responsables ante la justicia.