En un caso que ha conmocionado a la comunidad deportiva y más allá, Sean Higgins, el conductor acusado de matar al jugador de la NHL Johnny Gaudreau y a su hermano Matthew, compareció ante el juez el jueves para una audiencia de detención. Higgins, de 43 años, enfrenta múltiples cargos, incluyendo homicidio vehicular, tras el trágico accidente ocurrido en Oldmans Township, Nueva Jersey.
El incidente tuvo lugar cuando Higgins, presuntamente bajo la influencia del alcohol, intentó adelantar a dos vehículos más lentos en una carretera rural. Según el informe policial, Higgins había consumido entre cinco y seis cervezas antes del accidente y admitió haber bebido mientras conducía. Falló la prueba de sobriedad en el lugar y fue arrestado poco después.
Johnny Gaudreau, conocido cariñosamente como “Johnny Hockey”, era una estrella de la NHL que jugaba para los Columbus Blue Jackets. Su hermano Matthew también era un talentoso jugador de hockey, habiendo jugado en ligas menores. Ambos hermanos estaban en Nueva Jersey para asistir a la boda de su hermana, donde iban a servir como padrinos.
La comunidad de la NHL y los fanáticos del hockey han expresado su profundo dolor y consternación por la pérdida de los hermanos Gaudreau. Se han llevado a cabo vigilias con velas y homenajes en varias ciudades, destacando el impacto que ambos tuvieron tanto dentro como fuera del hielo.
Higgins, quien también es oficial de artillería de campo en la Guardia Nacional del Ejército de Nueva Jersey y trabajaba en un centro de rehabilitación, ha sido puesto en licencia administrativa por su empleador. La organización ha expresado sus condolencias a la familia Gaudreau y ha subrayado su compromiso con la justicia.
Durante la audiencia, Higgins apareció a través de Zoom y fue representado por un defensor público. Sin embargo, indicó que planea contratar a su propio abogado. La próxima audiencia está programada para la próxima semana, donde se decidirá si Higgins permanecerá detenido hasta el juicio.
La tragedia ha resaltado una vez más los peligros de conducir bajo la influencia del alcohol y ha llevado a llamados renovados para medidas más estrictas contra el manejo en estado de ebriedad. La familia Gaudreau ha pedido privacidad mientras enfrentan esta devastadora pérdida y han agradecido el apoyo de la comunidad.