THE LATIN VOX (28 de octubre del 2024).- Por Francisco Javier Valdiviezo Cruz.
La Agencia de Ingresos de Canadá (CRA, por sus siglas en inglés) enfrenta una grave crisis tras la revelación de que decenas de miles de cuentas de contribuyentes han sido hackeadas, mientras se desembolsaban millones en devoluciones fraudulentas. La agencia ha admitido que subestimó significativamente los ciberataques contra los contribuyentes canadienses en sus informes al Parlamento.
Durante el pico de la temporada fiscal de este año, la CRA descubrió que hackers habían obtenido datos confidenciales de una de las firmas de preparación de impuestos más grandes del país, H&R Block Canadá. Los impostores utilizaron las credenciales confidenciales de la empresa para acceder de manera no autorizada a las cuentas personales de cientos de canadienses en la CRA, cambiando información de depósitos directos, presentando declaraciones falsas y apropiándose de más de 6 millones de dólares en reembolsos fraudulentos.
En un caso notable, los hackers presentaron una declaración con un código postal legítimo, pero con una dirección falsa en una calle inexistente llamada “Tomato Street”. “Obviamente, la puerta está abierta y algunas personas están infiltrándose en el sistema”, comentó André Lareau, profesor asociado de impuestos en la Universidad Laval en Quebec. “Pero la CRA parece no haber encontrado la llave para cerrar la puerta”.
La magnitud de la crisis llevó a la CRA a contactar la oficina de la Ministra de Ingresos, Marie-Claude Bibeau. La agencia se preparó con líneas de respuesta para los medios en caso de que surgieran preguntas sobre la violación de datos de H&R Block y la razón por la que se desembolsaron millones a estafadores.
Este escándalo plantea serias preocupaciones sobre la seguridad de los datos y la capacidad de la CRA para proteger la información de los contribuyentes. A medida que las investigaciones continúan, la confianza del público en la agencia se encuentra en entredicho, lo que podría tener repercusiones en su reputación y en la relación con los ciudadanos.
Mientras tanto, los canadienses afectados por el robo de datos están preocupados por el uso indebido de su información personal y la posibilidad de que enfrenten problemas fiscales en el futuro. La situación destaca la necesidad urgente de mejorar las medidas de ciberseguridad y la vigilancia de las agencias gubernamentales para proteger la información sensible de los ciudadanos en un mundo cada vez más digital.
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