La directora ejecutiva de Save the Children Canadá, Bill Chambers, ha expresado su preocupación por el recorte de la ayuda al desarrollo anunciado por el gobierno canadiense en su último presupuesto. Según Chambers, esta medida afectará negativamente a la capacidad de Canadá para liderar la defensa de los derechos de la infancia en el mundo.
Chambers ha declarado que el recorte de la ayuda, que supone una reducción del 0,28% al 0,22% del Producto Interno Bruto (PIB) para el año 2026, es una decisión “corta de miras” que contradice el compromiso de Canadá con la Agenda 2030 de las Naciones Unidas. Esta agenda incluye 17 objetivos de desarrollo sostenible (ODS) que abordan temas como la pobreza, la salud, la educación, la igualdad de género y el cambio climático.
Chambers ha señalado que Canadá ha sido un actor clave en la promoción de los derechos de la infancia, especialmente en lo que respecta a la protección de los niños y niñas en situaciones de conflicto y crisis humanitaria. Asimismo, ha destacado el papel de Canadá en la iniciativa SheDecides, que busca garantizar el acceso a los servicios de salud sexual y reproductiva para las mujeres y las niñas.
Sin embargo, Chambers ha advertido que el recorte de la ayuda pondrá en riesgo estos avances y limitará la capacidad de respuesta de Canadá ante los desafíos globales que afectan a los niños y niñas. Por ello, ha instado al gobierno canadiense a reconsiderar su decisión y a aumentar progresivamente su contribución al desarrollo hasta alcanzar el 0,7% del PIB, que es el objetivo establecido por las Naciones Unidas.