Afganistán: Devastador terremoto de magnitud 6 sacude el país y deja más de 800 muertos y cerca de 3 000 heridos

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THE LATIN VOX (1 de septiembre de 2025). Por Daniela Medina. 

Un nuevo desastre natural ha golpeado a Afganistán, un país marcado por décadas de guerra, crisis humanitarias y catástrofes naturales.

En la madrugada del domingo, un terremoto de magnitud 6.0 sacudió violentamente las provincias orientales de Kunar y Nangarhar, dejando hasta el momento un saldo provisional de más de 800 personas fallecidas, cerca de 3 000 heridos y aldeas enteras reducidas a escombros.

El sismo, que se produjo a solo 10 kilómetros de profundidad, una cifra alarmantemente baja que intensifica los daños, tuvo su epicentro a unos 27 kilómetros al noreste de Jalalabad, una de las principales ciudades del este del país.

El movimiento telúrico se sintió en gran parte de Afganistán y en países vecinos como Pakistán y Tayikistán, provocando escenas de pánico en varias ciudades.

Un país en duelo: El impacto humano de la catástrofe

Las primeras cifras oficiales difundidas por el Ministerio de Desastres del gobierno talibán confirman que la provincia de Kunar ha sido la más afectada, con más de 600 fallecidos solo en esa región.

En Nangarhar, al menos 12 muertos y 250 heridos fueron reportados, mientras que otras zonas aún no han podido entregar balances debido al colapso de carreteras y a la interrupción de las comunicaciones.

Los testimonios de los sobrevivientes son desgarradores. Familias enteras quedaron sepultadas bajo sus propias casas, construidas mayoritariamente con ladrillo y barro, materiales altamente vulnerables a movimientos sísmicos.

Cuatro aldeas completas fueron arrasadas, y en varias comunidades los rescatistas hablan de “silencio absoluto entre los escombros”, un presagio del elevado número de víctimas atrapadas.

“Perdí a mis dos hijos, a mi madre y a mi esposa. Solo yo salí con vida. No queda nada de nuestra aldea”, relató con lágrimas un campesino de 40 años en la provincia de Kunar.

El desafío del rescate en un país devastado

Los esfuerzos de rescate comenzaron inmediatamente, pero las dificultades son enormes. El terreno montañoso, la precariedad de las carreteras y la destrucción de puentes han impedido que los equipos lleguen con rapidez a las comunidades más golpeadas. El Ministerio del Interior reportó más de 40 vuelos de auxilio con helicópteros militares para trasladar a los heridos a hospitales en Jalalabad y Kabul.

Sin embargo, la infraestructura hospitalaria de Afganistán, ya debilitada por años de conflicto y falta de inversión, está colapsando. Muchos centros de salud carecen de medicamentos básicos, equipos de trauma o personal capacitado. En algunos hospitales de campaña, médicos han debido operar sin anestesia adecuada ni electricidad estable.

“Es catastrófico. Necesitamos urgentemente ayuda internacional: medicamentos, tiendas de campaña, mantas, alimentos. No tenemos cómo responder solos a una tragedia de esta magnitud”, declaró el portavoz de la Media Luna Roja Afgana.

Una nación vulnerable en el corazón del Hindu Kush

Afganistán es uno de los países más sísmicamente vulnerables del mundo. Situado en la intersección de las placas tectónicas euroasiática e india, su territorio experimenta regularmente movimientos telúricos. La región montañosa del Hindu Kush, al noreste, es conocida por generar terremotos frecuentes y, en muchos casos, mortales.

Este desastre revive el recuerdo del terremoto de junio de 2022, cuando un movimiento de magnitud 6.1 mató a más de 1 000 personas en las provincias de Paktika y Khost. También recuerda al sismo de octubre de 2015, de magnitud 7.5, que dejó cientos de muertos en Afganistán y Pakistán.

Devastación en cifras

  • Magnitud: 6.0
  • Profundidad: 10 km (superficial, altamente destructivo)
  • Muertos: más de 800 confirmados (principalmente en Kunar)
  • Heridos: cerca de 3 000, con cifras en aumento
  • Aldeas destruidas: al menos 4 totalmente arrasadas
  • Infraestructura: carreteras, puentes y viviendas rurales gravemente afectadas
  • Vuelos de rescate: más de 40 realizados por helicópteros militares

Impacto regional e internacional

El terremoto no solo afecta a Afganistán. El temblor se sintió en Islamabad (Pakistán) y en zonas de Tayikistán, generando evacuaciones preventivas. Expertos advierten que, dado el precario sistema sanitario afgano, una segunda crisis humanitaria podría estar en camino: brotes de enfermedades infecciosas, falta de agua potable y desplazamientos masivos.

La ONU, la Cruz Roja Internacional y varias ONG ya han manifestado su disposición a enviar ayuda, pero las sanciones internacionales y la situación política del país, gobernado por el régimen talibán, podrían complicar la coordinación y la llegada de recursos.

“La política no puede ser un obstáculo para salvar vidas. Afganistán necesita asistencia inmediata y sin condiciones”, advirtió un vocero de Naciones Unidas en Ginebra.

La vulnerabilidad de mujeres y niños

De acuerdo con reportes iniciales, mujeres y niños representan una gran parte de las víctimas. En áreas rurales, muchas familias dormían en casas mal reforzadas, y al ocurrir el sismo de noche, los habitantes fueron sorprendidos sin posibilidad de escapar.

Además, las restricciones impuestas por el gobierno talibán al movimiento de mujeres han generado preocupación: en algunos casos, mujeres heridas no pudieron ser evacuadas sin acompañamiento masculino, retrasando la atención médica.

Un país que clama por ayuda

Este terremoto llega en un momento especialmente crítico para Afganistán, un país donde más de la mitad de la población depende de asistencia humanitaria y donde la inseguridad alimentaria afecta a millones.

La tragedia refuerza los llamados de la comunidad internacional a redoblar esfuerzos de cooperación en un país que, tras la retirada de fuerzas extranjeras en 2021, ha quedado cada vez más aislado diplomáticamente.

Para los habitantes de Kunar y Nangarhar, sin embargo, la urgencia es otra: rescatar a los sobrevivientes, enterrar a los muertos y reconstruir lo poco que queda en pie.

Conclusión

El devastador terremoto del 31 de agosto de 2025 es un recordatorio brutal de la vulnerabilidad de Afganistán frente a las fuerzas de la naturaleza y de la fragilidad de sus estructuras sociales y sanitarias. Con cientos de muertos confirmados y miles de heridos, el país enfrenta una nueva crisis que amenaza con desbordar su ya precaria estabilidad.

La comunidad internacional se enfrenta ahora a una decisión: intervenir con rapidez y apoyo concreto o permitir que, una vez más, Afganistán quede solo frente a la tragedia.

Fuente: CBC News

Foto: Al Jazeera


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