THE LATIN VOX (1 de marzo del 2025).- Por Kael Ponce de Leon garcia.
TORONTO, ON – En una jornada electoral marcada por la incertidumbre y el frío invernal, el líder del Partido Conservador Progresista, Doug Ford, ha logrado una victoria contundente al asegurar su tercera mayoría consecutiva en las elecciones provinciales de Ontario. Este resultado no solo consolida su liderazgo, sino que también establece un precedente histórico en la política de la provincia.
Las elecciones, celebradas el 27 de febrero de 2025, fueron las primeras en invierno desde 1981, lo que añadió un desafío adicional tanto para los candidatos como para los votantes. A pesar de las condiciones adversas, la participación electoral alcanzó aproximadamente el 45%, un ligero aumento respecto al mínimo histórico del 44% registrado en las elecciones de 2022. Este incremento, aunque modesto, ha sido recibido con alivio por los observadores políticos que temían una participación aún más baja debido a la convocatoria anticipada de elecciones por parte de Ford y la relativa novedad de los líderes del Partido Liberal y del Nuevo Partido Democrático (NDP), quienes asumieron sus roles en diciembre de 2023 y febrero de 2023, respectivamente.
El resultado ha sido un reflejo de la confianza de los votantes en la gestión de Ford, quien ha prometido enfrentar las amenazas económicas continuas, especialmente aquellas provenientes de las tarifas impuestas por el presidente de los Estados Unidos, Donald Trump. Durante la campaña, Ford realizó dos viajes a Washington, D.C., para abordar estos temas, demostrando su compromiso con la defensa de los intereses económicos de Ontario en el escenario internacional.
En cuanto a los resultados específicos, el Partido Conservador Progresista mantuvo su dominio en la Asamblea Legislativa, asegurando un número similar de escaños al de la legislatura anterior. Entre los resultados destacados, el Partido Verde logró retener sus dos escaños en Guelph y Kitchener Centre, con su líder Mike Schreiner reelegido en Guelph. Schreiner ha prometido que su partido actuará como una oposición vigilante, comprometiéndose a mantener al gobierno de Ford bajo control.
La victoria de Ford ha sido recibida con reacciones mixtas. Mientras que sus partidarios celebran la continuidad y estabilidad que su liderazgo promete, los críticos señalan que la campaña fue percibida como una maniobra cínica para consolidar el poder, especialmente en un contexto donde la diferenciación entre las opciones políticas no fue suficientemente clara para muchos votantes.
A medida que Ontario se prepara para los próximos cuatro años bajo el liderazgo de Ford, la atención se centrará en cómo su gobierno abordará los desafíos económicos y sociales que enfrenta la provincia. La capacidad de Ford para cumplir sus promesas electorales y manejar las relaciones con la administración estadounidense será crucial para determinar el éxito de su tercer mandato.