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El primer ministro de Ontario, Doug Ford, anunció la convocatoria de elecciones provinciales anticipadas para el 27 de febrero de 2025, adelantando la fecha previamente establecida para junio de 2026. Esta decisión se toma en un contexto de creciente preocupación por las amenazas de aranceles por parte del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que podrían afectar gravemente la economía de Ontario, especialmente su sector manufacturero.
Ford, líder del Partido Conservador Progresista, busca obtener un tercer mandato consecutivo con mayoría absoluta, tras victorias en 2018 y 2022. La provincia de Ontario, hogar de casi el 40% de la población canadiense, es un centro neurálgico de la manufactura y podría enfrentar desafíos económicos significativos si Trump implementa un arancel del 25% sobre las importaciones canadienses.
En respuesta a estas amenazas, Ford ha propuesto medidas de represalia, incluyendo la retirada de bebidas alcohólicas de fabricación estadounidense de los estantes de Ontario y la inversión de miles de millones de dólares para apoyar la economía provincial.
Sin embargo, los partidos de oposición critican la convocatoria electoral, acusando a Ford de utilizarla como distracción de una investigación policial sobre un controvertido acuerdo de intercambio de tierras que involucra a su gobierno.
A pesar de las críticas, Ford mantiene que la convocatoria electoral es necesaria para obtener un mandato claro que le permita enfrentar los desafíos económicos y comerciales que se avecinan. La decisión de adelantar las elecciones refleja la urgencia con la que el gobierno provincial busca prepararse para posibles represalias comerciales y proteger la economía de Ontario.
La convocatoria de elecciones anticipadas en Ontario marca un momento crucial en la política canadiense, ya que la provincia se prepara para enfrentar desafíos económicos significativos en un entorno internacional incierto. La decisión de Ford de adelantar las elecciones refleja la urgencia con la que el gobierno provincial busca prepararse para posibles represalias comerciales y proteger la economía de Ontario.