THE LATIN VOX (27 de junio del 2025).- Por Francisco Javier Valdiviezo Cruz.
Johnny Noviello, un ciudadano canadiense de 49 años, falleció esta semana mientras estaba detenido en un centro de custodia del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE) en Florida, informó la agencia en un comunicado oficial.
Según ICE, Noviello murió el lunes, y la causa de su fallecimiento aún se desconoce, estando bajo investigación. A pesar de su ciudadanía canadiense, Noviello residía en Estados Unidos desde 1988 y obtuvo la residencia legal permanente en 1991. En 2023, fue condenado por múltiples delitos, incluyendo conspiración criminal (racketeering) y tráfico de drogas, recibiendo una sentencia de 12 meses de prisión.
Documentos judiciales públicos de ese caso indican que Noviello padecía epilepsia y requería medicación para controlar sus convulsiones, un detalle que ha generado preocupación sobre las condiciones de salud y atención médica recibida durante su detención.
ICE arrestó a Noviello en mayo y lo mantenía detenido «pendiente de procedimientos de deportación», según el comunicado de la agencia.
La ministra canadiense de Asuntos Exteriores, Anita Anand, confirmó la noticia en sus redes sociales el jueves, indicando que las autoridades consulares canadienses están en contacto con funcionarios estadounidenses para obtener más información sobre el caso. Anand expresó sus «sinceras condolencias a la familia».
La muerte de Noviello se produce en medio de una campaña intensificada de redadas migratorias ordenadas por la administración del presidente Donald Trump, quien ha emitido varias órdenes ejecutivas para reforzar el control de la inmigración ilegal y avanzar en su plan de deportar a millones de personas sin estatus legal en Estados Unidos.
Stephen Miller, subjefe de gabinete de la Casa Blanca y principal artífice de estas políticas migratorias, ha impulsado a ICE a aumentar su número diario de arrestos a al menos 3,000, muy por encima de los 650 diarios registrados en los primeros meses del segundo mandato de Trump. El propio presidente ha instado a los agentes a «hacer todo lo posible para lograr el objetivo muy importante de llevar a cabo el programa de deportación masiva más grande de la historia».
Estas medidas han provocado protestas masivas, especialmente en Los Ángeles, donde manifestantes se han opuesto a la represión migratoria. En respuesta, Trump ordenó el despliegue de tropas en la ciudad, lo que provocó la crítica abierta del gobernador de California, Gavin Newsom.
Johnny Noviello no es el único ciudadano canadiense arrestado en Estados Unidos durante esta ola de redadas. Jasmine Mooney, originaria de Columbia Británica, fue detenida y retenida casi dos semanas tras intentar renovar su visa de trabajo. Finalmente fue liberada y regresó a Canadá en marzo.
La muerte de Noviello ha reabierto el debate sobre las condiciones y procedimientos en los centros de detención de ICE, así como la protección de los derechos humanos y la salud de los detenidos, especialmente cuando presentan condiciones médicas preexistentes.
Las investigaciones continúan y las autoridades canadienses y estadounidenses están bajo presión para esclarecer las circunstancias que rodearon este fallecimiento.
Crédito fotográfico: Josh Denmark/DHS