THE LATIN VOX (22 de noviembre del 2024).- Por Francisco Javier Valdiviezo Cruz
El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha propuesto una serie de medidas radicales que podrían cambiar la forma en que los usuarios interactúan con la búsqueda en línea, entre ellas la venta del navegador Chrome de Google, la compartición de datos y resultados de búsqueda con rivales y, en casos extremos, la venta del sistema operativo móvil Android. Estas propuestas, que forman parte de un caso histórico que busca frenar el monopolio de Google en la búsqueda en línea, podrían tener un impacto significativo en el mercado digital.
En una presentación ante el juez el pasado miércoles, los fiscales argumentaron que el comportamiento ilícito de Google ha privado a sus competidores de canales de distribución críticos y de socios distribuyentes que podrían permitir la entrada de competidores al mercado de manera innovadora. Según el Departamento de Justicia y las autoridades antimonopolio de varios estados, Google ha utilizado su dominio del mercado de las búsquedas, que procesa el 90 % de las consultas en EE. UU., para eliminar la competencia de forma ilegal.
Medidas propuestas para restaurar la competencia
Entre las medidas que se están evaluando se incluyen la prohibición de acuerdos exclusivos en los que Google paga miles de millones de dólares anualmente a Apple y otros fabricantes de dispositivos para que su motor de búsqueda sea el predeterminado en sus teléfonos inteligentes y tabletas. Además, se propone que Google no pueda volver a ingresar al mercado de los navegadores durante cinco años y, en caso de que otras soluciones no restauren la competencia, se le obligue a vender Android, su sistema operativo móvil.
El Departamento de Justicia también ha solicitado que Google sea prohibido de comprar o invertir en rivales de la búsqueda, productos de inteligencia artificial basados en consultas o tecnología publicitaria. También se sugiere que los editores y sitios web puedan optar por no ser incluidos en el entrenamiento de los productos de IA de Google, lo que afectaría la capacidad de la empresa para usar datos de terceros en sus algoritmos.
Para supervisar la implementación de estas propuestas, un comité técnico de cinco personas sería designado por el juez, con el poder de exigir documentos, entrevistar empleados y examinar el código del software de Google. El comité, que sería financiado por Google, tendría la autoridad para asegurar el cumplimiento de las reglas.
Críticas de Google y posibles implicaciones económicas
La respuesta de Google a estas propuestas no se ha hecho esperar. En un comunicado, Kent Walker, director legal de Alphabet, calificó las medidas de «desmesuradas» y advirtió que su implementación podría suponer una «intromisión sin precedentes» del gobierno, que afectaría a los consumidores, desarrolladores y pequeñas empresas estadounidenses, además de poner en peligro el liderazgo global económico y tecnológico de EE. UU. en un momento crítico.
El caso se encuentra en una fase temprana, y el juicio sobre las propuestas está programado para abril. Sin embargo, la futura administración de Donald Trump podría intervenir y cambiar el rumbo del proceso, lo que podría alterar las acciones legales en curso.
La importancia de Chrome en el negocio de Google
El navegador Chrome es un pilar fundamental del negocio de Google, siendo el más utilizado en el mundo. A través de Chrome, Google obtiene valiosa información sobre los usuarios que le permite dirigir los anuncios de forma más efectiva y rentable. La empresa ha argumentado que la venta de Chrome y Android, ambos basados en código abierto y ofrecidos de manera gratuita, perjudicaría a las empresas que han creado productos utilizando estas plataformas.
Además, Google se vería obligada a compartir sus resultados de búsqueda con competidores a un costo nominal y a compartir los datos que recopila de los usuarios de forma gratuita. La empresa no podría seguir recopilando datos de usuarios si no pudiera compartirlos debido a preocupaciones sobre la privacidad.
Impacto en la competencia
Las propuestas buscan reducir las barreras para que otras empresas puedan competir con Google. DuckDuckGo, un motor de búsqueda que se considera uno de los principales competidores de Google, ha expresado su apoyo a estas medidas. Kamyl Bazbaz, jefe de asuntos públicos de DuckDuckGo, comentó que esta decisión “es un gran paso y disminuirá las barreras para la competencia”. DuckDuckGo ha acusado a Google de tratar de eludir las regulaciones de la Unión Europea que exigen la compartición de datos.
Por su parte, Google ha asegurado que no comprometerá la confianza de los usuarios al compartir datos sensibles con sus competidores, subrayando que proteger la privacidad de sus usuarios es una prioridad fundamental.
En este momento, el caso promete tener repercusiones significativas no solo para Google, sino también para la forma en que las empresas tecnológicas operan a nivel global, abriendo un nuevo capítulo en la regulación de los monopolios digitales y la competencia en el mercado de las búsquedas en línea.
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