THE LATIN VOX (22 de febrero del 2025).- Por Francisco Javier Valdiviezo Cruz
En un giro inesperado, Enrique Tarrio, exlíder nacional del grupo de extrema derecha Proud Boys, fue arrestado el pasado viernes cerca del Capitolio de Estados Unidos, acusado de agredir a una mujer durante una protesta.
Este incidente ocurrió poco después de una conferencia de prensa en la que Tarrio participó junto a miembros de su grupo y Stewart Rhodes, fundador de los Oath Keepers, otro grupo extremista. Rhodes, al igual que Tarrio, había sido condenado por conspiración sediciosa en relación con el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021, pero fue liberado tras recibir un indulto presidencial de Donald Trump.
Según las autoridades del Capitolio, los oficiales presenciaron el momento exacto en que Tarrio golpeó el celular y el brazo de la mujer que lo estaba grabando mientras caminaba cerca del Capitolio. La mujer, quien había colocado su teléfono cerca de su rostro, declaró a la policía su intención de presentar una denuncia formal, lo que llevó al arresto de Tarrio por «agresión simple». El incidente tuvo lugar después de que la conferencia de prensa de Tarrio terminara «sin incidentes», según los informes policiales.
El arresto de Tarrio ocurre en un contexto aún más polémico, ya que el exlíder de los Proud Boys había sido condenado previamente a una pena de 22 años de prisión por su papel en los disturbios del Capitolio.
Sin embargo, en enero, recibió un indulto por parte del presidente Trump, quien decidió conmutar las sentencias de más de 1,500 personas involucradas en el asalto al Capitolio. Esta decisión fue una de las primeras acciones de Trump tras retomar la Casa Blanca en 2021, luego de perder las elecciones presidenciales de 2020 frente a Joe Biden.
La concesión de indultos a los atacantes del Capitolio ha sido profundamente impopular entre los estadounidenses. Según una encuesta reciente realizada por Washington Post/Ipsos, más del 80% de los encuestados desaprobaron esta medida, que se ha visto como un acto de apoyo a los responsables de la violencia que ese día intentaron interrumpir el proceso democrático en Estados Unidos.
Tarrio y tres de sus subordinados fueron condenados por conspiración sediciosa por haber planeado el asalto al Capitolio en un intento desesperado por mantener a Trump en el poder, a pesar de su derrota electoral ante Biden.
Durante la protesta del viernes, Tarrio estuvo acompañado de Rhodes y otros miembros de los Proud Boys, lo que generó nuevamente controversia, ya que tanto él como Rhodes siguen siendo figuras clave en el extremismo de derecha en Estados Unidos.
Este nuevo arresto pone de manifiesto la continua polarización política en el país, así como el impacto duradero de los eventos del 6 de enero de 2021. El episodio también resalta la influencia de los grupos extremistas y la forma en que sus líderes siguen siendo apoyados y protegidos por una parte significativa de la política estadounidense.
La pregunta ahora es si estos incidentes seguirán desencadenando más protestas y divisiones o si el sistema judicial finalmente logrará procesar de manera efectiva a quienes intentaron socavar la democracia en el Capitolio.
Crédito fotográfico: NBC News