EE.UU. inicia revisión del acuerdo comercial con Canadá y México: primer paso hacia posibles renegociaciones

THE LATIN VOX (16 de septiembre de 2025).- Por Daniela Medina. 

El gobierno de Estados Unidos ha puesto en marcha un proceso formal para revisar el acuerdo comercial que lo vincula con Canadá y México, conocido como USMCA (United States-Mexico-Canada Agreement). Este examen institucional se hace conforme al mandato legal de revisión del tratado, con miras a evaluaciones que podrían conducir a ajustes significativos, tanto en normas de origen, mecanismos de cumplimiento, regulaciones sectoriales y posiblemente nuevos aranceles o restricciones. Se espera que el proceso concluya hacia el verano de 2026.

¿Qué es lo que se está revisando y por qué?

Mandato legal del USMCA

• Según lo acordado cuando se firmó el USMCA en 2020, los tres países Estados Unidos, México y Canadá tienen la obligación de revisar el tratado cada seis años. Ese plazo sitúa la revisión para julio de 2026.
• Antes de esa revisión conjunta, cada país debe llevar a cabo consultas internas (con empresas, sectores afectados, sociedad civil, expertos), presentar recomendaciones, y preparar propuestas de modificación si las consideran necesarias.

Motivos del interés estadounidense

• Las tensiones comerciales recientes, incluidas imposiciones de aranceles por parte del gobierno de EE.UU. sobre productos importados de Canadá y México —en algunos casos relacionados con preocupaciones de seguridad nacional, prácticas desleales, competencia económica y manufactura de automóviles— han reavivado cuestionamientos sobre si el acuerdo satisface los objetivos actuales de política comercial estadounidense.
• Un punto clave son las reglas de origen de los vehículos y componentes automotrices: Washington observa posibles desvíos o uso de partes con contenido chino que no cumplan estándares que favorecen la industria estadounidense. Si se confirmara, dichos componentes podrían reducir las ventajas arancelarias que Canadá o México obtienen bajo USMCA.
• También hay preocupación en EE.UU. sobre el balance del trato: déficit comercial, competitividad manufacturera, impacto en empleos industriales, implicaciones de la inflación importada, y cómo ciertos sectores perciben que las condiciones actuales del tratado no fueron diseñadas para estos nuevos desafíos globales.

Cómo se llevará a cabo la revisión

• Se abrió un período de consultas públicas en EE.UU. de 45 días para que empresas, trabajadores, asociaciones industriales y ciudadanos hagan aportes sobre qué funciona, qué no, y qué cambios consideran necesarios.
• También se ha programado una audiencia pública ante la Comisión de Comercio Internacional estadounidense para noviembre. Ahí se podrán escuchar testimonios formales de interesados.
• Canadá ya comenzó su propio proceso de consulta pública, mientras que México alista reuniones y grupos de trabajo sectoriales. Todos estos procesos deben culminar en propuestas conjuntas para la reunión trilateral de revisión del USMCA en 2026.

Posibles áreas de disputa o negociación

Los analistas identifican varias áreas que probablemente serán objeto de debate intenso:

1. Reglas de origen y contenido regional
   Cuántos componentes de un producto automotriz, por ejemplo, deben ser fabricados en Norteamérica para gozar de beneficios arancelarios bajo el USMCA. También el escrutinio del origen de ciertos insumos y posibles “trampeos” con insumos de fuentes no permitidas.
2. Aranceles, proteccionismo y medidas no arancelarias
   Empeño del gobierno estadounidense de imponer aranceles sobre productos importados percibidos como competencia desleal o que afectan industrias domésticas, así como controversias sobre subsidios, dumping, barreras regulatorias, etc.
3. Sector automotor
   Este sector es central, tanto por su tamaño como por lo complejo de las cadenas de suministro que atraviesan los tres países. Cualquier cambio en reglas de origen o en exigencias de contenido nacional tendrá impactos importantes en la producción, empleo y comercio regional.
4. Temas de seguridad nacional, comercio digital y tecnología
   En la revisión se incluirán aspectos como la protección de datos, origen y control de tecnología (por ejemplo componentes electrónicos o semiconductores), y cómo prevenir que productos transnacionales se utilicen para evadir restricciones USA-China.
5. Estándares laborales y ambientales
   Ya son parte del USMCA algunos compromisos en derechos laborales, mecanismos de respuesta rápida, y regulaciones ambientales. EE.UU. podría buscar reforzar estos estándares, exigir mayor cumplimiento, sanciones más firmes si alguno de los países fallara.

Repercusiones para Canadá y México

Económicas

• Las industrias exportadoras de Canadá y México podrían ver cambios en sus costos de cumplimiento, en sus márgenes si los nuevos estándares son más exigentes.
• Posible aumento de precios de productos manufacturados si los costos de producción se elevan por revisiones de reglas de origen o la obligación de utilizar insumos más caros de EE.UU. o dentro de Norteamérica.
• Inversores podrían mostrarse cautelosos ante la incertidumbre de qué tanto cambiará el marco comercial, lo cual podría afectar decisiones de expansión de fábricas, inversiones en nuevas cadenas de valor, etc.

Políticas

• Los gobiernos de Canadá y México deberán negociar estratégicamente: aceptar algunos ajustes, defender lo que consideran intereses nacionales fundamentales, posiblemente negociar concesiones mutuas.
• También la revisión puede ser fuente de tensiones diplomáticas si alguno siente que EE.UU. presiona excesivamente, o actúa unilateralmente bajo pretexto de seguridad nacional o proteccionismo.

Sociales y sectoriales

• Trabajadores industriales, automotrices, agroindustriales de exportación podrían estar expuestos a cambios de empleo si algunas plantas se vuelven menos competitivas o si nuevas reglas implican reestructuración.
• Consumidores podrían sentir cambios en precios o disponibilidad de productos importados.

Riesgos y desafíos del proceso

• La revisión puede alargar incertidumbre: hasta que no se acuerden los cambios, empresas no sabrán bajo qué reglas operarán, lo que puede frenar inversión o decisiones de largo plazo.
• Riesgo de disputa comercial: si Canadá o México sienten que EE.UU. está incumpliendo, podrían presentar denuncias ante paneles de solución de controversias, lo que afectaría relaciones exteriores y estabilidad comercial.
• La política interna de EE.UU. tiene fuerte influencia: presiones de grupos industriales, sindicatos, legisladores pueden forzar que el gobierno adopte una línea dura, lo que complica lograr acuerdos balanceados.
• En tiempos de inflación global, costos energéticos altos y presiones migratorias, cualquier cambio que eleve precios o genere barreras podría generar reproches domésticos en los tres países.

Importancia estratégica global

• USMCA es uno de los mayores bloques comerciales del mundo, con una población conjunta de más de 500 millones y un comercio interno en bienes y servicios que supera el billón de dólares anuales. La estabilidad del tratado es clave para la competitividad de Norteamérica frente a otros bloques como la Unión Europea, Mercosur, o Asia.
• En un contexto de tensión EE.UU.-China, la revisión puede marcar cómo EE.UU. busca fortalecer cadenas de suministro “amigables”, limitar dependencia de insumos extranjeros críticos, y asegurar que acuerdos comerciales sean también instrumentos de seguridad económica.
• También es una prueba de si el USMCA puede adaptarse a realidades nuevas: digitalización, cambios tecnológicos, normas ambientales más estrictas, conciencia social sobre derechos laborales, sostenibilidad, etc.

Hitos y calendario previsto

• Comienzo oficial: publicación en el Federal Register del aviso de revisión, que da inicio al plazo de 45 días para recibir comentarios públicos de EE.UU. sobre el USMCA.
• Audiencia pública: prevista para noviembre de 2025, donde se escucharán testimonios formales de sectores afectados, ONGs, empresas, etc.
• Reunión trilateral de revisión: fijada para el 1 de julio de 2026, fecha en que se espera que los países presenten propuestas de modificación si las hubiere.

Reflexión final

La revisión del USMCA por parte de Estados Unidos marca un momento decisivo para el comercio en América del Norte. No es simplemente “chequear que todo vaya bien”, sino que podría implicar cambios sustanciales al marco económico y normativo de décadas de integración regional.

El resultado de este proceso podría reforzar el tratado, modernizarlo, adaptarlo a los retos del siglo XXI (tecnología, verificación de origen, sostenibilidad, equidad laboral). Pero también existe el riesgo de que, si las demandas estadounidenses son demasiado rígidas o costosas para los otros países, se genere fricción prolongada, pérdida de certezas, posibles represalias segmentadas, o una erosión de la cooperación trilateral.

Para Canadá, México y EE.UU., este proceso no solo prueba su voluntad de mantener un sistema comercial funcional, sino también su capacidad de hacerlo bajo presión política interna, bajo cambios globales rápidos, y en un entorno donde el comercio y la diplomacia muchas veces ya no pueden separarse.

Fuente: www.ft.com

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