THE LATIN VOX (9 de septiembre de 2025).- Por Francisco Javier Valdiviezo Cruz.
Un nuevo escándalo sacude a Meta, la empresa matriz de Facebook e Instagram, tras las denuncias de seis ex y actuales empleados que aseguran que la compañía encubrió pruebas sobre el daño que sus productos de realidad virtual estaban causando a niños y adolescentes.
Según los denunciantes, la compañía manipuló o eliminó investigaciones internas que mostraban a menores expuestos a acoso sexual, conductas de grooming y escenas de violencia dentro de sus entornos de realidad virtual. “Meta sabía que niños menores de edad usaban sus productos, pero pensó: ‘los niños generan interacción’, y eso les daba dinero”, declaró Jason Sattizahn, uno de los investigadores que trabajó en el área de VR.
Los documentos y testimonios ya han sido entregados al Congreso, la Comisión de Bolsa y Valores (SEC) y la Comisión Federal de Comercio (FTC). Este martes, Sattizahn y Cayce Savage, quien fue responsable de la experiencia juvenil en VR, comparecerán ante el subcomité del Senado sobre privacidad, tecnología y ley.
“Tragar ese asco”
Los denunciantes relataron que los directivos de Meta desalentaban cualquier estudio que pudiera demostrar daño infantil en la realidad virtual. En un caso, un investigador fue instruido a “tragarse ese asco”. En otro, se le pidió borrar parte de una entrevista con una familia alemana: un adolescente contó que su hermano, menor de 10 años, había recibido proposiciones sexuales de adultos dentro de las plataformas de Meta.
La revelación se suma a años de críticas hacia la empresa por no proteger adecuadamente a los menores en sus redes sociales. Legisladores estadounidenses han cuestionado en repetidas ocasiones a Mark Zuckerberg, su director ejecutivo, por difundir contenidos que promueven bullying, abuso de drogas y autolesiones entre los jóvenes.
En una audiencia celebrada en enero de 2024, el propio Zuckerberg ofreció disculpas públicas: “Lo siento por todo lo que sus familias han tenido que pasar. Nadie debería vivir esas experiencias, y por eso invertimos tanto en seguridad y seguiremos colaborando a nivel industrial para evitar que se repitan”.
Meta se defiende
La portavoz de Meta, Dani Lever, rechazó las acusaciones asegurando que desde 2022 la compañía ha aprobado 180 estudios sobre seguridad y bienestar en VR. “Estos ejemplos aislados se están uniendo para construir una narrativa falsa y predeterminada”, señaló. Añadió que la empresa ha introducido herramientas de supervisión parental y mecanismos para limitar contactos no deseados en sus productos de realidad virtual.
La presión política aumenta
Las denuncias han encendido las alarmas en el Capitolio. La senadora republicana Marsha Blackburn afirmó que el caso demuestra la necesidad urgente de regular a las grandes tecnológicas: “En lugar de atender las serias preocupaciones sobre el daño infantil en sus plataformas, Meta silenció a empleados, enterró pruebas atroces y usó a niños inocentes como piezas de ajedrez para engordar sus bolsillos”.
Los seis denunciantes están representados por Whistleblower Aid, una organización legal sin fines de lucro, y se espera que su testimonio intensifique la presión para que el Congreso apruebe nuevas leyes que impongan salvaguardias estrictas a las empresas tecnológicas.
En medio de las acusaciones, el gigante tecnológico enfrenta otra prueba para su credibilidad: demostrar que no solo busca dominar el metaverso, sino también proteger a quienes más vulnerables son dentro de él.
Crédito fotográfico: Wired