THE LATIN VOX (8 de noviembre del 2024).- Por Francisco Javier Valdiviezo Cruz
La derrota electoral del Partido Demócrata en las recientes elecciones de Estados Unidos ha desatado un aluvión de críticas y reflexión interna sobre qué salió mal y qué se necesita cambiar para recuperar la confianza del electorado. Desde el descontrol del Senado hasta la aún incierta contienda por la Cámara de Representantes, las consecuencias de la jornada electoral del martes no podrían ser más claras: una derrota a gran escala que muchos interpretan como un rechazo al partido en todos los niveles.
Entre las voces más críticas, algunos estrategas políticos sugieren que los demócratas deben dejar de centrarse en figuras públicas y causas populares, como la opulenta presencia de Oprah Winfrey, y empezar a centrarse en los temas que realmente preocupan a la mayoría de los votantes: la economía, el empleo y la vida diaria de los ciudadanos.
Escuchar la voz popular
El asesor político Chris Kofinis ha sido claro en su diagnóstico: “Los temas que realmente importan a los votantes son los problemas cotidianos, los de la economía. Eso está en la cima de la pirámide. Y luego, por debajo de eso, vienen los demás temas”, dijo Kofinis en una reciente entrevista. Según él, el Partido Demócrata ha dejado de escuchar a los votantes promedio, dedicándose más a cuestiones de identidad política y menos a las preocupaciones económicas que son la base de las elecciones.
Varios analistas han coincidido en que la campaña demócrata se desvió del enfoque que habría sido más efectivo para atraer a una amplia base de votantes. En lugar de centrarse en soluciones económicas concretas para la clase trabajadora y la clase media, el partido se inclinó hacia temas culturales y de valores, lo que podría haber alienado a los votantes más pragmáticos.
La sombra de Kamala Harris
Una de las figuras más señaladas dentro del partido es la actual vicepresidenta Kamala Harris, quien ha sido criticada por no haber logrado definirse como líder clara y por no haber articulado de manera convincente sus políticas económicas y sociales. A pesar de que Harris se dedicó, sobre todo en las últimas semanas de la campaña, a advertir sobre los peligros que representaba un regreso de Donald Trump, algunos estrategas creen que el enfoque en la figura del expresidente eclipsó sus propias propuestas políticas sobre temas de interés diario para los votantes.
Además, ha sido cuestionada la decisión de Joe Biden de no haber dejado el cargo antes, lo que dejó a Harris con un tiempo limitado para organizar una campaña eficaz. Algunos observadores consideran que este retraso en la transición de poder ha afectado la capacidad del Partido Demócrata para revitalizar su mensaje y recuperar terreno en las elecciones intermedias.
La «repudiación total» del Partido Demócrata
A medida que los votos continúan siendo contados, las críticas al desempeño electoral del partido se intensifican. En especial, algunos ven en los resultados un rechazo generalizado al enfoque del Partido Demócrata. Según Kofinis, la derrota de los demócratas refleja una «repudiación total» del partido a todos los niveles: “Perdimos apoyo demócrata en todas las ciudades, condados y estados”, dijo. Y agregó con dureza: “Actuamos como si nuestro producto fuera excelente. Pero la verdad es que ese producto no gusta. Y por eso la gente no lo compró”.
El impacto de la economía en los votantes latinos y afroamericanos
Una de las sorpresas de esta elección fue el avance de Donald Trump entre los votantes afroamericanos y latinos, grupos que históricamente han favorecido al Partido Demócrata. Las encuestas de salida sugieren que muchos votantes estaban insatisfechos tanto con la dirección del país como con la economía, lo que podría haber influido en su decisión de apoyar a Trump o de optar por no votar.
El expresidente, que todavía tiene la posibilidad de obtener entre 301 y 314 votos en el Colegio Electoral, ha logrado conectar con sectores que se sienten olvidados por la élite política de Washington. Esto, según los analistas, es una clara advertencia para los demócratas de que deben escuchar más atentamente las preocupaciones de los votantes de clase media y baja, especialmente en tiempos de incertidumbre económica.
La reflexión del Partido Demócrata
Tras esta derrota, la pregunta que se impone dentro del Partido Demócrata es clara: ¿qué deben hacer para recuperar el apoyo de los votantes y competir efectivamente en futuras elecciones? Las respuestas apuntan a una necesidad de reorientar el mensaje hacia los problemas cotidianos de la gente, dejando de lado las luchas ideológicas y concentrándose en la economía y el bienestar social.
Muchos sugieren que la solución está en recuperar la conexión con las clases trabajadoras y los votantes más vulnerables, aquellos que han visto una disminución en su poder adquisitivo y sienten que los temas más importantes de sus vidas no han sido tratados adecuadamente por los políticos.
En resumen, el Partido Demócrata se enfrenta a un periodo de reflexión profunda. Sin un cambio significativo en su enfoque, algunos temen que el ciclo de derrotas electorales se repita en futuras elecciones, con un Trump fortalecido y una base electoral desilusionada.
Crédito fotográfico: AP News