El Banco de Canadá ha decidido mantener su tasa de interés de referencia en el 4,5% el miércoles, mientras espera que el efecto de sus anteriores subidas de tipos se filtre a través de la economía. La institución ha señalado que la inflación se ha desacelerado en los últimos meses, debido a la caída de los precios de la energía y a la moderación de las presiones de la demanda.
La inflación anual se situó en el 4,2% en marzo, por debajo del 4,8% de febrero y del 5,1% de enero. El Banco de Canadá espera que la inflación se mantenga alrededor del 4% en el corto plazo, pero que se reduzca al 3% a mediados de 2023 y vuelva al 2% el próximo año.
El Banco de Canadá ha subido su tasa de interés cuatro veces desde julio de 2022, en un total de un punto porcentual, para contener la inflación y evitar el sobrecalentamiento de la economía. Sin embargo, la institución ha adoptado un tono más cauto en su último comunicado, indicando que la evolución de la economía y de la inflación dependerá de varios factores de incertidumbre, como la pandemia, el mercado laboral, el gasto de los hogares, el comercio internacional y el precio del petróleo.
El Banco de Canadá ha dicho que seguirá vigilando de cerca estos factores y que ajustará su política monetaria según sea necesario para lograr su objetivo de inflación del 2%. La institución ha reiterado que su tasa de interés es el principal instrumento que utiliza para controlar la inflación y que influye en las tasas de interés de otros tipos de préstamos en la economía, como la tasa preferencial de los bancos comerciales (que se utiliza para los préstamos hipotecarios y las líneas de crédito).