El Colegio Militar Real de Canadá (CMR), ubicado en Kingston, Ontario, es una de las instituciones más prestigiosas del país, donde se forman los futuros oficiales de las Fuerzas Armadas Canadienses. Sin embargo, el CMR ha sido objeto de varias críticas y escándalos en los últimos años, relacionados con casos de suicidios y conductas sexuales inapropiadas entre los cadetes.
En 2016, el Ministerio de Defensa Nacional ordenó una revisión completa del CMR, tras la muerte de cuatro cadetes por causas no naturales en un lapso de siete meses. La revisión, realizada por un panel de ex oficiales superiores, encontró que el CMR tenía problemas de liderazgo, disciplina, moral, bienestar y clima laboral.
El panel hizo 79 recomendaciones para mejorar la situación del CMR, entre las que se incluían aumentar el número y la calidad de los instructores, reforzar el código de conducta, implementar un programa de prevención del suicidio, y crear una oficina de diversidad e inclusión.
Sin embargo, cuatro años después, solo 43 de las recomendaciones se habían implementado completamente, y otras 22 estaban en proceso de implementación. El resto seguían pendientes o no se habían iniciado.
Además, el CMR siguió enfrentando denuncias de conductas sexuales inapropiadas entre los cadetes, que iban desde comentarios ofensivos hasta agresiones sexuales. Según un informe de 2019, el 41% de los cadetes del CMR habían sido testigos o víctimas de algún tipo de acoso sexual en el último año, y el 10% habían sufrido algún tipo de agresión sexual.
Estos datos reflejan la cultura de impunidad y silencio que impera en el CMR, donde muchos cadetes temen denunciar los abusos por miedo a represalias o a perder su carrera militar. Además, la falta de supervisión y apoyo de los instructores y el personal civil contribuye a que los cadetes se sientan aislados y estresados.
Ante esta situación, el Ministerio de Defensa Nacional ha anunciado que realizará una nueva revisión del CMR, esta vez a cargo de la ex jueza de la Corte Suprema Louise Arbour, quien también investigará la respuesta de las Fuerzas Armadas Canadienses ante los casos de acoso y agresión sexual en sus filas.
La revisión de Arbour tendrá como objetivo determinar si el CMR cumple con su misión de formar a los oficiales con los más altos estándares de excelencia, integridad y respeto, y si ofrece un ambiente seguro y saludable para los cadetes.
El CMR se enfrenta así al desafío de recuperar su prestigio y su credibilidad, y de demostrar que es capaz de adaptarse a los valores y las demandas de la sociedad canadiense.