Los habitantes del oeste de Canadá han experimentado un drástico cambio de temperatura en los últimos días, pasando de un clima veraniego a uno invernal en cuestión de una semana. La llegada de un frente frío ha provocado la caída de la nieve en algunas zonas, lo que podría afectar a los desplazamientos matutinos de esta semana.
Las provincias de Alberta, Saskatchewan y Manitoba han registrado temperaturas por debajo del promedio para esta época del año, con mínimas que han llegado a los -10°C en algunas localidades. Además, se han producido nevadas en las zonas montañosas y en las praderas, que han dejado un manto blanco de hasta 15 centímetros de espesor.
El meteorólogo Tyler Hamilton explicó que este fenómeno se debe a la combinación de una masa de aire frío proveniente del Ártico y una corriente de chorro que ha favorecido la formación de nubes y precipitaciones. Hamilton advirtió que las condiciones podrían empeorar en los próximos días, con más nieve y viento en el oeste de Canadá.
Las autoridades han recomendado a los conductores que extremen la precaución al volante, ya que las carreteras podrían estar resbaladizas y con poca visibilidad. Asimismo, han instado a los ciudadanos a abrigarse bien y a estar atentos a las alertas meteorológicas. Se espera que el tiempo mejore a partir del fin de semana, con un aumento gradual de las temperaturas.