
THE LATIN VOX (17 de octubre del 2025).- Por Daniela Medina.
En un momento histórico que marca un hito en las relaciones entre la Iglesia Católica y la Iglesia de Inglaterra, el rey Carlos III se convertirá en el primer monarca inglés reinante en medio milenio en orar públicamente junto a un papa. Durante su visita de Estado al Vaticano los días 22 y 23 de octubre, Carlos y la reina Camila participarán en un servicio ecuménico en la Capilla Sixtina junto al Papa León XIV, un gesto simbólico y significativo en una relación marcada desde su origen por fracturas religiosas.
El evento es considerado como un paso diplomático y espiritual importante, que busca tender puentes tras siglos de desconfianza y separación religiosa desde la ruptura iniciada por Enrique VIII en 1534
Contexto: rupturas, reconciliaciones y simbolismo
La ruptura con Roma y los efectos históricos
Desde el siglo XVI, con Enrique VIII rompiendo vínculos con el Papado, Inglaterra y luego Gran Bretaña experimentaron una severa fractura entre la Corona y la Iglesia Católica. Esa ruptura institucional dio paso a siglos de tensiones religiosas, persecuciones y desconfianza mutua. El monarca de Inglaterra es cabeza formal de la Iglesia Anglicana, pero jamás hasta ahora un monarca en ejercicio había orado públicamente junto a un pontífice.
Aunque reyes británicos han visitado el Vaticano por ejemplo, la reina Isabel II en 1961 esas visitas no han implicado actos litúrgicos conjuntos ni gestos públicos de oración compartida. Esta diferencia hace que el viaje de Carlos tenga esa singularidad.
La visita al Vaticano y el programa anunciado
Durante esos dos días en el Vaticano, Carlos y Camila presenciarán el servicio ecuménico en la Capilla Sixtina junto al papa León XIV. Además, visitarán la Basílica de San Pablo Extramuros (St. Paul Outside the Walls), un templo con vínculos históricos a la monarquía inglesa incluso en tiempos del período sajón.
Como parte del gesto simbólico, el papa confirió a Carlos el título honorífico de “real confrater” de la basílica. Asimismo, se diseñará una silla especial con su escudo real que permanecerá en la basílica como marca permanente del respeto mutuo.
El Palacio de Buckingham señaló que este será el primer viaje de Estado, desde la reforma protestante, en que el pontífice y el monarca orarán juntos en un servicio ecuménico en la Capilla Sixtina, y también será la primera vez que un monarca asista a un oficio en la basílica de San Pablo Extramuros.
Interpretaciones e implicaciones
En la Iglesia de Inglaterra y en el Reino Unido se ven valoraciones contrastantes:
- Por un lado, muchos lo interpretan como un gesto audaz y conciliador frente a siglos de tensión religiosa; una reafirmación del diálogo ecuménico en un mundo donde las estructuras se buscan unificarse frente a crisis globales.
- Por otro, no faltan quienes consideran que es un acto simbólico con poca repercusión doctrinal, pues las diferencias teológicas entre anglicanos y católicos siguen siendo profundas (por ejemplo, en la ordenación de mujeres, el celibato clerical y el reconocimiento mutuo de sacramentos).
- Desde la Iglesia Católica se ve como una señal de confianza diplomática, un reconocimiento respetuoso de que las heridas históricas aún pueden sanarse mediante gestos públicos de hermandad.
Riesgos, desafíos y tensiones
- En círculos religiosos conservadores ingleses puede haber resistencia: algunos puristas pueden interpretar que el monarca se está acercando demasiado a la Iglesia Católica.
- En la opinión pública la atención será alta: cualquier acto percibido como concesión puede generar polémica política o mediática en un país con memoria histórica de conflictos religiosos.
- El viaje deberá manejarse con discreción diplomática para no provocar interpretaciones de subordinación o conflicto institucional entre la Corona, la Iglesia de Inglaterra y el Papado.
Significado global y lección de reconciliación
Este momento va más allá del Reino Unido: en un mundo globalizado donde las divisiones religiosas y culturales siguen activas, ver a un monarca anglicano orando junto a un papa transmite un mensaje de esperanza para el diálogo interconfesional.
Refleja también que las instituciones históricas pueden transformarse simbólicamente sin renunciar a su identidad: Carlos, como jefe de la Iglesia de Inglaterra, busca tender puentes sin borrar sus raíces institucionales.
Fuente: /www.theguardian.com
Foto: Google fotos