THE LATIN VOX (7 de octubre del 2025).- Por Daniela Medina.
La compañía Bolero Shellfish Processing Inc., radicada en Saint-Simon, New Brunswick, fue multada con 1 millón de dólares canadienses la sanción máxima permitida y se le impuso una prohibición de diez años para participar en el Programa de Trabajadores Temporales Extranjeros (Temporary Foreign Worker Program, TFWP), tras encontrarse múltiples incumplimientos graves en su operación laboral. (Global News)
El 17 de septiembre la sanción fue declarada oficialmente, como respuesta del gobierno federal ante un historial de infracciones laborales, condiciones deplorables para los trabajadores y uso indebido del programa. La decisión fue calificada por el Ministerio de Empleo y Desarrollo Social como la penalidad más grande hasta la fecha emitida por ese departamento.
Bolero Shellfish negó las acusaciones a través de un comunicado en el que afirma que la evaluación de las autoridades “no refleja la realidad de sus prácticas ni su compromiso con el bienestar de los empleados contratados bajo el programa”.
Causas y hallazgos que motivaron la sanción
Violaciones múltiples al programa y leyes laborales
El gobierno federal determinó que Bolero incumplió con varios requisitos esenciales del TFWP y normativa laboral provincial/federal, entre ellos:
- Salarios y condiciones laborales discrepantes
Las remuneraciones o condiciones ofrecidas no correspondían a lo que estaba prometido en los contratos laborales o en las ofertas de empleo registradas. - Ambiente de trabajo abusivo o sin garantías de protección
No se proporcionó un entorno laboral libre de abuso físico, psicológico, financiero o represalias. - Incumplimiento de leyes de reclutamiento y empleo
La empresa incumplió leyes federales o provinciales relativas al reclutamiento o contratación de trabajadores en la provincia donde estos laboraban. - Inspecciones previas y antecedentes de no conformidad
Bolero ya estaba registrada como empleador no conforme en la base de datos federal.
Estas infracciones fueron consideradas graves y acumulativas, lo que justificó la imposición del máximo castigo posible bajo la normativa vigente.
Magnitud de la penalización y comparativa histórica
- La multa de 1 millón CAD es la más alta que el departamento federal ha aplicado hasta ahora contra un empleador bajo el programa.
- A nivel operativo, la prohibición de 10 años significa que Bolero no podrá acceder al programa de trabajadores extranjeros durante una década, lo que afecta su capacidad de operar en industrias que dependen significativamente de mano de obra foránea.
- En el último año fiscal, el gobierno federal realizó 1,435 inspecciones a empleadores, encontrando que el 10 % no cumplía con las reglas del programa. En ese período, las multas impuestas ascendieron a 4,9 millones CAD, frente a 2,1 millones del año anterior. Además, 36 empleadores fueron vetados del programa, triplicando las prohibiciones en relación al año previo.
Consecuencias, reacciones y disputa legal
Impacto para Bolero Shellfish y el sector
- La sanción representa un golpe financiero severo para la empresa, que deberá cubrir la multa y gestionar su operatividad sin acceso al programa de trabajadores extranjeros.
- Si Bolero dependía fuertemente de mano de obra externa —como muchas industrias de procesamiento de mariscos en Canadá—, esta imposibilidad podría afectar su producción, contrato con clientes internacionales y procesamiento de pedidos.
Rechazo y amenazas de apelación
Bolero Shellfish ha anunciado que impugnará la sanción en los tribunales, argumentando que las conclusiones del gobierno no reflejan sus prácticas reales ni su compromiso con empleados extranjeros.
Voces de organizaciones de migrantes
Grupos que defienden los derechos de trabajadores migrantes han expresado que las multas recaudadas deberían distribuirse como compensación para los empleados que fueron víctimas de abuso o explotación. Señalan que, bajo el esquema actual de cumplimiento, casi no hay mecanismos de reparación directa para los trabajadores.
Además, instan a que las inspecciones sean más proactivas, no solo reactivas ante denuncias. Que no dependa de los trabajadores denunciar abusos cuando, por temor, no pueden hacerlo.
Implicaciones públicas, políticas y reguladoras
Interpretación reguladora y mensaje gubernamental
El gobierno federal, al aplicar la sanción máxima, envía un claro mensaje: el uso indebido del programa de trabajadores temporales no será tolerado y habrá consecuencias severas para quienes violen sus normas.
La presión política y mediática aumenta para que esta decisión no quede aislada y se utilice como punto de partida para fortalecer el programa, mejorar supervisión y garantizar mayor protección a los trabajadores migrantes.
Presión para reformas estructurales del TFWP
- Podrían contemplarse cambios legales que flexibilicen mecanismos de sanción, aumenten las frecuencias de auditoría no anunciada y establezcan obligaciones de restitución para trabajadores afectados.
- Asimismo, se plantea la posibilidad de condicionar la participación futura al cumplimiento demostrado durante años anteriores.
Riesgos de precedentes excesivos
Al imponer multas severas y vetos prolongados, el gobierno debe equilibrar entre sancionar abusos y no asfixiar empresas legítimas que dependen en parte del programa. Una regulación demasiado estricta podría debilitar ciertos sectores.
Fuente: globalnews.ca
Fotos: Google fotos