En un movimiento estratégico para profundizar las relaciones bilaterales, Estados Unidos ha anunciado planes para apoyar proyectos de infraestructura, semiconductores y procesamiento de níquel en Filipinas. Esta iniciativa llega en un momento en que ambos países, aliados de larga data, buscan fortalecer sus lazos de inversión tras reavivar sus conexiones defensivas.
Durante la visita del presidente filipino, Ferdinand Marcos Jr., a Washington para su primera reunión trilateral con el presidente estadounidense Joe Biden y el primer ministro japonés Fumio Kishida, se delinearon una serie de proyectos. Entre ellos, destaca la colaboración trilateral para acelerar las inversiones en el Corredor Económico de Luzón, que promoverá la conectividad entre Subic Bay y Clark, dos antiguas bases militares estadounidenses ahora convertidas en centros comerciales, Manila y la provincia de Batangas en la isla principal del país.
Los proyectos incluyen la modernización de ferrocarriles y puertos, energía limpia, cadenas de suministro de semiconductores, agroindustria y mejoras en el puerto civil de Subic Bay. Además, en un impulso a los esfuerzos del presidente Marcos por desarrollar la industria minera del país, Estados Unidos está apoyando una subvención para Eramen Minerals Inc. para desarrollar una planta de procesamiento de mineral a níquel y cobalto.
United Parcel Service Inc. (UPS) también planea expandir sus operaciones en Clark, con la construcción de un nuevo centro logístico que se espera comience en febrero de 2025 y esté operativo a finales de 2026. Asimismo, Filipinas ha acogido una “inversión estratégica” por parte de Ultra Safe Nuclear Corp. para el desarrollo de reactores modulares micro para el país.
En el ámbito de la defensa, Estados Unidos tiene previsto realizar proyectos en bases filipinas a las que el ejército estadounidense puede acceder bajo el Acuerdo de Cooperación de Defensa Mejorada de 2014, que se amplió el año pasado para incluir cuatro sitios más, incluyendo áreas cercanas a Taiwán. La solicitud de presupuesto de Biden para el año fiscal 2025 incluye $128 millones adicionales para proyectos de infraestructura.
La Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) también lanzará el próximo año una iniciativa de ayuda humanitaria en uno de los sitios para la respuesta a desastres civiles de Filipinas en tiempos de crisis. La Casa Blanca también destacó el aumento de la cooperación entre Estados Unidos y Filipinas en el Mar del Sur de China a “niveles históricos”, incluyendo los ejercicios militares del domingo pasado con Japón y Australia en la vía fluvial donde Beijing reclama amplias pretensiones.