THE LATIN VOX (1 de noviembre del 2024).- Por Francisco Javier Valdiviezo Cruz
En medio de un conflicto que ya se extiende por un año, altos funcionarios estadounidenses han sostenido conversaciones en Israel con el objetivo de negociar un alto el fuego con Hezbollah, mientras se reportan más muertes de civiles en ambos países. En las últimas 24 horas, los ataques aéreos de las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF) han dejado 45 muertos en Líbano, mientras que en el norte de Israel, un ataque de cohetes ha cobrado la vida de siete personas, incluidos cuatro trabajadores tailandeses.
El primer ministro en funciones de Líbano, Najib Mikati, había expresado anteriormente optimismo sobre un posible acuerdo «en horas o días». Sin embargo, en un giro sombrío, señaló que la «escalada continua» de Israel en su país «no inspira optimismo». Este jueves, Israel emitió una segunda orden de evacuación para la ciudad de Baalbek y dos aldeas circundantes en el valle de Bekaa, llevando a cabo una serie de ataques aéreos en la aldea de Durous poco después. La orden de evacuación ha desencadenado un éxodo masivo de residentes de la ciudad, que alberga un sitio declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
A pesar de los peligros de los bombardeos israelíes, algunos residentes optaron por quedarse. En Bednayel, una aldea en las afueras de Baalbek, rescatistas recuperaron un cadáver entre los escombros de un edificio colapsado tras un ataque aéreo israelí la noche anterior. Ocho miembros de la misma familia fueron víctimas del bombardeo.
Fadi, un hombre de 30 años y dueño de un café de videojuegos, compartió su desgarradora experiencia: “El pueblo entero tembló. Vine aquí y saqué a mi hermano de entre los escombros. Saqué pedazos de él”. Desestimó cualquier conversación sobre una pausa en las hostilidades, afirmando: “No queremos un alto el fuego, queremos orar en la mezquita de Al-Aqsa [en Jerusalén]. Quiero vengarme, desde la persona que lanzó el misil hasta el que dio la orden, [Benjamin] Netanyahu”.
El ministerio de Salud de Líbano informó que los ataques israelíes han causado 45 muertes en el país en las últimas 24 horas, en medio de bombardeos en el noreste del valle de Bekaa y enfrentamientos en el sur. En una aldea de Bekaa, ocho miembros de la misma familia perdieron la vida debido a un ataque aéreo.
En el norte de Israel, la situación también es crítica, con siete civiles muertos por el fuego de cohetes provenientes de Líbano. Este ataque marcó las peores pérdidas civiles en Israel en un solo día desde que el país comenzó sus incursiones terrestres en Líbano el 1 de octubre.
A medida que la violencia se intensifica y las negociaciones para un alto el fuego parecen estancadas, la comunidad internacional observa con creciente preocupación la escalada del conflicto y sus devastadoras consecuencias para la población civil de ambas naciones.
Crédito fotográfico: Hassan Ammar/AP