Un ex colega del presunto filtrador de información secreta de la Real Policía Montada de Canadá (RCMP) declaró en su juicio que nunca lo escuchó hablar de hacer operaciones encubiertas o de tener contactos con agencias extranjeras.
Cameron Ortis, quien era el director general de la unidad de inteligencia nacional de la RCMP, está acusado de violar la Ley de Seguridad de la Información al supuestamente revelar secretos a una entidad no autorizada o a una persona extranjera entre 2015 y 2019.
El ex colega, cuya identidad está protegida por una orden judicial, testificó que trabajó con Ortis en la misma oficina desde 2016 hasta su arresto en 2019. Dijo que Ortis era el jefe de su equipo y que tenía acceso a información clasificada de alto nivel.
El testigo dijo que Ortis nunca le mencionó que estuviera involucrado en operaciones encubiertas o que tuviera contactos con agencias extranjeras como el FBI o la CIA. También dijo que nunca vio a Ortis usar un teléfono celular encriptado o una computadora portátil personal en el trabajo.
El testigo afirmó que Ortis era reservado y que no compartía muchos detalles sobre su vida personal. Sin embargo, dijo que Ortis le contó que había viajado a Japón varias veces y que tenía una novia japonesa.
El testigo también dijo que Ortis le habló de sus problemas financieros y de su intención de vender su casa en Ottawa. Según el testigo, Ortis le dijo que tenía una hipoteca alta y que había invertido en una empresa de criptomonedas que había fracasado.
El juicio de Ortis, que comenzó el pasado 28 de septiembre, se espera que dure hasta diciembre. Ortis se ha declarado no culpable de los siete cargos que enfrenta, que incluyen fraude, abuso de confianza y obstrucción a la justicia.