Una ex estudiante de la Universidad de Columbia Británica (UBC) Okanagan, que sufrió una lesión cerebral traumática en un accidente automovilístico, ha ganado un caso de derechos humanos contra la institución por no proporcionarle las adaptaciones adecuadas para sus estudios.
Stephanie Hale, de 28 años, se matriculó en el programa de enfermería de la UBC Okanagan en 2015, después de haber sufrido el accidente en 2012. Debido a su lesión, Hale tenía dificultades para concentrarse, recordar información y procesar información compleja. Solicitó a la universidad que le concediera más tiempo para completar los exámenes y las tareas, así como un lugar tranquilo para hacerlos.
Sin embargo, Hale afirmó que la universidad no cumplió con sus solicitudes y que se enfrentó a una actitud hostil por parte de algunos profesores y administradores. Según Hale, la universidad le dijo que no podía tener más tiempo para los exámenes porque eso le daría una ventaja injusta sobre los demás estudiantes. También afirmó que la universidad le negó el acceso a un tutor y a un mentor, y que la presionó para que abandonara el programa.
Hale presentó una queja ante el Tribunal de Derechos Humanos de Columbia Británica en 2018, alegando que la universidad había violado su derecho a la igualdad y a la no discriminación por motivos de discapacidad. El tribunal celebró una audiencia en marzo de 2020 y emitió su decisión el 31 de agosto de 2021.
El tribunal determinó que la universidad había discriminado a Hale al no proporcionarle las adaptaciones razonables que necesitaba para participar plenamente en su educación. El tribunal ordenó a la universidad que pagara a Hale 23.000 dólares canadienses por daños y perjuicios por lesiones a su dignidad, sentimientos y autoestima, así como 5.000 dólares canadienses por gastos.
Hale dijo que se sentía “liberada” y “validada” por la decisión del tribunal. Afirmó que su objetivo era crear conciencia sobre las dificultades a las que se enfrentan los estudiantes con discapacidades y abogar por un cambio en el sistema educativo. También expresó su esperanza de reanudar sus estudios de enfermería en otra institución.
La UBC Okanagan dijo que estaba revisando la decisión del tribunal y que no haría más comentarios al respecto. La universidad afirmó que se toma muy en serio sus obligaciones con los estudiantes con discapacidades y que trabaja continuamente para mejorar sus servicios y políticas.