En los últimos años, ha habido un acalorado debate en América del Norte sobre quiénes deberían tener permitido competir en deportes. Mientras la discusión gira en torno a conceptos de equidad e inclusión, los investigadores afirman que la ciencia sobre si los atletas trans tienen una ventaja competitiva aún no está resuelta.
La propuesta de políticas en Alberta, Canadá, podría afectar a los jóvenes y adultos trans, incluyendo restricciones en la atención médica de afirmación de género y políticas de pronombres en las aulas. Entre las políticas propuestas se encuentra la prohibición de que las niñas y mujeres trans compitan contra niñas y mujeres en competiciones atléticas. La ministra de Alberta, Danielle Smith, ha afirmado que en algunos deportes, las diferencias físicas sí importan, y se busca permitir que las mujeres biológicas participen en categorías exclusivas para mujeres biológicas, al tiempo que se preservan las categorías de género neutro y las oportunidades mixtas.
Aunque los detalles de estas políticas propuestas son escasos, se espera que la legislación se introduzca en otoño. Si se aprueba, Alberta sería la primera provincia en implementar este tipo de prohibición. Para atletas trans como Aria McGowan, esto podría afectar profundamente su participación en el deporte. McGowan, mariscal de campo del equipo de fútbol americano femenino Edmonton Storm, expresó emociones encontradas ante la posibilidad de que se le prohíba jugar. La incertidumbre radica en si las atletas trans realmente tienen una ventaja competitiva, y la respuesta aún no es definitiva.
El debate sobre los derechos de los atletas trans sigue poniendo a prueba los límites actuales de la ciencia y la ley. La investigación se ha centrado en los niveles de testosterona para justificar la exclusión o inclusión de atletas trans, pero esta simplificación ha sido objeto de críticas. La conversación sobre la inclusión de mujeres trans en el deporte femenino se centra en el equilibrio entre la inclusión, la equidad deportiva y la seguridad, y en si las mujeres trans pueden competir en categorías femeninas sin que su sexo biológico les otorgue una ventaja injusta o represente una amenaza de lesiones para otras competidoras.