En la noche del jueves, Beirut fue sacudida por una serie de explosiones gigantes cerca del Aeropuerto Internacional Rafic Hariri. Las explosiones, que fueron captadas en video, han sido reportadas por diversas agencias de noticias internacionales y libanesas. Los fuertes estallidos se escucharon en las inmediaciones del aeropuerto, que colinda con el suburbio de Dahieh, conocido como el bastión de Hezbolá en la ciudad y un objetivo recurrente de los ataques aéreos israelíes.
El origen de las explosiones aún no ha sido confirmado, pero se presume que son resultado de bombardeos israelíes en su continua campaña contra Hezbolá. La zona de Dahieh ha sido un punto focal en el conflicto, debido a la presencia de infraestructuras y líderes de Hezbolá. Los ataques aéreos han sido una táctica recurrente en los enfrentamientos entre Israel y Hezbolá, intensificándose en las últimas semanas.
Las imágenes de las explosiones muestran una escena de devastación, con grandes columnas de humo elevándose hacia el cielo nocturno. Los residentes de Beirut, ya acostumbrados a la inestabilidad, se enfrentan una vez más a la incertidumbre y el miedo. Las autoridades locales han instado a la población a mantenerse en sus hogares y evitar las áreas afectadas mientras se llevan a cabo las investigaciones y se evalúan los daños.
Este incidente subraya la frágil situación en el Líbano, un país que ha estado lidiando con múltiples crisis, desde la económica hasta la política. La comunidad internacional ha expresado su preocupación por la escalada de violencia y ha llamado a la moderación y al diálogo para evitar una mayor desestabilización en la región.
Mientras tanto, los equipos de emergencia trabajan incansablemente para atender a los heridos y asegurar las áreas afectadas. La magnitud de las explosiones ha dejado a muchos en estado de shock, recordando los devastadores eventos del pasado reciente, como la explosión en el puerto de Beirut en 2020.
La situación sigue siendo tensa y en desarrollo, con la comunidad internacional observando de cerca los acontecimientos. La esperanza es que se pueda evitar una escalada mayor y que se encuentren soluciones pacíficas para los conflictos que continúan afectando a esta región históricamente turbulenta.