THE LATIN VOX (30 de noviembre del 2024).- Por Francisco Javier Valdiviezo Cruz.
El Gran Premio de Catar de Fórmula 1 se desarrolló con una gran dosis de sorpresa y emoción, especialmente para Max Verstappen, quien vivió una montaña rusa de emociones durante la clasificación.
El campeón del mundo parecía haber logrado una victoria en la posta, su primera desde Austria en junio, solo para que los comisarios revocaran su tiempo más de tres horas después, dándole a George Russell la posta en su lugar.
La controversia que costó la pole a Verstappen
Verstappen había conseguido una vuelta impresionante, que inicialmente lo había colocado al frente, pero todo se desmoronó cuando los comisarios decidieron investigar una maniobra en la que el piloto de Red Bull bloqueó a Russell en su vuelta de enfriamiento.
Después de una larga revisión, los comisarios decidieron penalizar al neerlandés con una posición en la parrilla por «conducir innecesariamente despacio en una vuelta de enfriamiento», lo que afectó a Russell, quien tuvo que abandonar la pista para evitar un incidente, comprometiendo su vuelta de calentamiento.
La sanción no fue tan severa como suele ser en estos casos, ya que no se trataba de una vuelta rápida de los pilotos en el momento del incidente.
Verstappen, visiblemente frustrado, no ocultó su desconcierto ante la decisión: «Si me quitan la pole, entonces no tiene ningún sentido», comentó. «Todos íbamos despacio. No sé qué más podría haber hecho. Es muy extraño que tenga que ir a los comisarios». A pesar de su incredulidad, el campeón aceptó la decisión, aunque su celebración por lo que parecía ser una remontada heroica quedó empañada por la penalización.
McLaren da un paso hacia el título de constructores tras 26 años de sequía
Mientras Verstappen lidiaba con la amarga frustración de la sanción, el equipo McLaren se perfilaba como el gran beneficiado del día. Tras un sprint espectacular en el que Oscar Piastri y Lando Norris consiguieron una impresionante remontada para terminar en primero y segundo lugar, McLaren se acercaba cada vez más al título de constructores, algo que no conseguían desde 1998.
Con McLaren liderando el campeonato de constructores con 24 puntos de ventaja sobre Ferrari antes del Gran Premio, y extendiendo esa ventaja a 30 puntos tras el sprint, el equipo británico llegaba a la clasificación con optimismo. Aunque Verstappen había asegurado el título de pilotos para él mismo, McLaren sigue con la mira puesta en conseguir su primer título de constructores en más de dos décadas, un logro que parece cada vez más alcanzable si mantienen su buen ritmo de carreras.
Un final de temporada de alta tensión para Ferrari y Mercedes
Mientras McLaren se posicionaba como favorito para cerrar la temporada con un golpe de autoridad, las escuderías rivales también tenían sus cartas que jugar. Ferrari, con Charles Leclerc y Carlos Sainz saliendo desde la quinta y séptima posición, aún mantiene sus posibilidades de pelear por el título de constructores, pero necesitarán un rendimiento sobresaliente en la carrera del domingo para reducir la diferencia con McLaren. Mercedes, por su parte, no podía descuidarse, y con Lewis Hamilton saliendo desde la sexta posición, también tenía que sacar su mejor versión para mantener vivas sus opciones de campeonato.
Russell, el beneficiado de la penalización de Verstappen
El verdadero protagonista de la clasificación, en cuanto a la pole position, fue George Russell. A pesar de no haber logrado el tiempo más rápido en la última ronda, el piloto británico fue el beneficiario directo de la penalización a Verstappen. Con un tiempo de 1:20.575, Russell había sido superado por Verstappen por solo 0.055 segundos, pero su oportunidad llegó cuando los comisarios decidieron sancionar al neerlandés. Aunque Russell reconoció que su vuelta de calentamiento había sido interrumpida por el tráfico, aún se mostró feliz de haber logrado finalmente la pole.
Una clasificación que deja mucho por decidir
La clasificación del Gran Premio de Catar nos dejó con una parrilla de salida cargada de incertidumbre. McLaren, con Norris y Piastri en tercer y cuarto lugar, mostró su potencial, y Ferrari, aunque lejos de la cabeza, aún tiene margen de maniobra. La penalización a Verstappen solo agrega más morbo a la disputa, mientras el joven campeón busca cerrar una temporada de ensueño con otra victoria. Sin embargo, con Russell en pole y una lucha tan apretada por el campeonato de constructores, el espectáculo está servido y la incertidumbre reina a medida que la temporada se acerca a su final.
La carrera del domingo será crucial para varios equipos, pero especialmente para McLaren, que podría poner fin a una sequía de títulos de 26 años si logra mantener su rendimiento frente a los desafíos que aún les esperan.
Crédito fotográfico: The Independent