Las proveedoras de servicios de aborto en Arizona han prometido continuar ofreciendo sus servicios hasta que se vean obligadas a detenerse, después de que la Corte Suprema de Arizona allanara el camino para la aplicación de una ley de 1864 que criminaliza el aborto durante todo el embarazo, a menos que la vida de la mujer esté en riesgo. Esta decisión ha sacudido al estado, y las mujeres, incluidas las médicas, se debaten sobre cómo responder a una ley que no contempla excepciones para casos de violación o incesto.
Los legisladores estatales se reunieron bajo la creciente presión de demócratas y algunos republicanos, incluido el expresidente Donald Trump, para intervenir. Los demócratas de la Cámara de Representantes y al menos un republicano intentaron abrir una discusión para derogar la prohibición de 1864, pero los líderes republicanos, que tienen la mayoría, la rechazaron dos veces y clausuraron rápidamente la sesión. Los demócratas indignados estallaron en cánticos de «¡Vergüenza! ¡Vergüenza! ¡Vergüenza!».
La gobernadora demócrata Katie Hobbs instó previamente a la Legislatura a revocar la prohibición y señaló que podrían hacerlo hoy mismo. Según AP VoteCast, el 60% de los votantes de Arizona en las elecciones de medio término de 2022 dijeron que favorecerían el acceso legal al aborto a nivel nacional. En 2022, se registraron 11,530 abortos en el estado, según el Departamento de Servicios de Salud.
En la clínica Camelback Family Planning en Phoenix, donde se realiza aproximadamente una cuarta parte de los abortos en Arizona, la enfermera registrada Ashleigh Feiring afirmó que los servicios de aborto aún están disponibles y que el personal espera que la legislación de emergencia evite interrupciones o cierres. “Nuestro plan es mantenernos abiertos el mayor tiempo posible”, dijo Feiring. “Nuestra clínica ha sido cerrada dos veces en los últimos cuatro años, pero siempre hemos reanudado el servicio”.
Al mismo tiempo, grupos antiaborto, incluido SBA Pro-Life America, instaron a los residentes de Arizona a oponerse a una iniciativa de votación propuesta que busca incluir los derechos al aborto en la constitución estatal de Arizona. La presidenta de SBA, Marjorie Dannenfelser, afirmó que esta iniciativa eliminaría todas las leyes pro-vida establecidas por la Legislatura, reflejando la voluntad del pueblo.
A pesar de este fallo, la lucha no ha terminado. La gobernadora Hobbs predice que la indignación motivará a los votantes a consagrar los derechos al aborto en la ley estatal. Mientras tanto, el expresidente Trump, en un evento de recaudación de fondos en Atlanta, criticó la decisión de la corte de Arizona y pidió a los legisladores estatales que la cambien, incluso mientras defendía la decisión de la Corte Suprema de EE. UU. de anular Roe v. Wade en 2022.